El negocio estaba cerrado al sufrir otro incendio el pasado marzo
Parece que la suerte no acompaña a este negocio de bricolaje. Y es que el pasado 11 de marzo efectivos del Cuerpo de Bomberos ya tuvieron que sofocar el fuego que se originó en torno a las dos menos veinte de la madrugada. En el anterior incendio, las consecuencias no fueron tan graves, aunque casi un centenar de vecinos tuvieron que ser desalojados, ya que el fuego afectó a ocho viviendas colindantes. El origen del incidente fue el cortocircuito del cableado del local que comenzó a arder, extendiéndose por el resto del inmueble. Las características de los materiales almacenados en el lugar de los hechos facilitaron que el fuego se propagara a gran velocidad. En aquella ocasión, cinco efectivos del Cuerpo de Bomberos de León y varios agentes de la Policía Local se personaron en el negocio incendiado y, después de más de tres horas de trabajo, en torno a las 5.00 horas, dieron por sofocado el incendio. La mayor parte de los vecinos afectados por el desajolo fueron básicamente estudiantes de la Universidad de León y personas de la tercera edad. Debido a la urgencia con la que tuvieron que salir a la calle, la mayoría de los vecinos apareció en las aceras colindantes con ropa de dormir, aunque posteriormente se les permitió recoger algunos de sus efectos personales para poder hacer frente al frío de la noche. Una vez que se dio por extinguido el incendio y la normalidad volvió a reinar en la zona siniestrada, los vecinos pudieron regresar a sus casas. Igual que en esta ocasión, la eficiencia de los bomberos también evitó una tragedia mayor.