Las UPA cuestiona la gestión de la crisis del cultivo bioenergético

La superficie de cultivos agroenergéticos para biodiesel descendió más de un 90 por ciento con respecto a la campaña pasada en Castilla y León según la organización agraria UPA que califica de «frustrante» la sensación que tienen los agricultores respecto a este tipo de cultivos agroenergéticos, tanto de cereales para bioetanol como de oleaginosas (colza y girasol) para biodiesel. Así, el número de hectáreas destinadas a estos cultivos descendió de forma alarmante según fuentes de UPA pasando de 86.000 hectáreas campaña pasada a 7.000 en esta. Los responsable de la organización se preguntan qué ha sido del fenómeno de los biocarburantes y de dónde va a salir la materia prima que utilizarán las grandes fábricas instaladas. UPA recuerda la importante apuesta que ha hecho el Gobierno autonómico con millonarios presupuestos públicos para que esas instalaciones revirtiesen esos apoyos administrativos en riqueza para la región y recuerda que la situación actual dista mucho de las previsiones realizadas en su día, y a pesar de que la capacidad de producción de biocarburantes es elevada, la Junta no garantiza que el suministro de materias primas proceda del campo. Relación con el petróleo 7.000 hectáreas de producción de semillas van a producir apenas 14 toneladas de cultivos agroenergéticos. En este contexto los productores consideran que las fábricas instaladas pueden ser utilizadas para importar aceite base, o simplemente para permanecer cerradas en un momento que resulta difícil de entender cuando el precio del barril del petróleo alcanza los 145 dolares. La realidad apunta a que la cercanía de las plantas de producción a día de hoy no producirá ni siquiera una pequeña ventaja para el agricultor local afectado.