Le piden 17 años de prisión por abusar de la hija y la sobrina de su pareja

La sección Primera de la Audiencia Provincial de León pasará vista oral el próximo miércoles 17 de septiembre, a partir de las 10.00 de la mañana a la acusación de abusos sexuales que pesa contra un individuo de León, vecino de una localidad del alfoz, para el que la fiscal solicita una pena de 17 años de prisión. La acusación particular solicita que la sentencia condene a 20 años de prisión al procesado, cuya defensa entiende que no es autor de los delitos que se le imputan y exige la libre absolución con todos los pronunciamientos favorables. Los hechos que se juzgarán la semana próxima datan del año 2004. El procesado había establecido una relación sentimental con una joven, madre de dos hijas y compartieron una vivienda por espacio de seis años. Sostiene la fiscal en su escrito de calificaciones provisionales que aprovechando las ausencias de su madre, el sospechoso trató de penetrar a la niña por vía anal y vaginal, pese al daño que le hacía por tener la pequeña apenas siete años de edad. También la conminó a que le practicara felaciones y advertía a la víctima que si contaba algo a su madre, se exponía a las consecuencias. Entre el verano y la navidad del 2006, el acusado llevó a cabo conductas que resultaban molestas a la sobrina de su pareja. La joven contaba 14 años de edad y con el pretexto de hacerle cosquillas trataba presuntamente de besarla, tocarla por debajo de su ropa interior, se acercaba con las manos a los pechos y en alguna ocasión a las ingles, lo que ella evitaba poniendo sus manos y abandonando el lugar. Estas actitudes tenían lugar cuando la muchacha visitaba junto a su madre, el domicilio del imputado, que permaneció en prisión preventiva por espacio de 26 días en marzo del 2007. La fiscal entiende que se trata de un delito continuado de agresión sexual y un delito continuado de abusos sexuales, por los que solicita una pena de 17 años de prisión, suma otros tres años de cárcel en sus calificaciones por el delito de la prohibición de alejarse a la hija de su pareja por espacio de diez años, así como la prohibición de aproximarse durante diez años a menos de 500 metros de la pequeña, con la que no puede comunicarse por ningún medio, así como en un periodo de cinco años a la sobrina de su pareja. Se establece una indemnización de 6.000 euros para la niña y 2.000 para su prima, que habrán de ser entregadas a sus representantes legales por ser menores de edad. La defensa sostiene que la hijastra del acusado había recibido una educación severa y rígida por parte del imputado, circunstancia que motivó que denunciase hechos inciertos. Recuerda que la pequeña acabó retractándose y que su prima ha realizado declaraciones judiciales que prueban que nunca ha existido el delito penal que se denuncia y recuerda el sufrimiento moral y la angustia que ha padecido el procesado.