La ARMH tiene un censo documentado de casi 2.000 leoneses desaparecidos

La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica está en condiciones de remitir a la Audiencia Nacional los datos de cerca de dos mil leoneses desaparecidos, represaliados y enterrados sin una localización concreta en la guerra civil o en la época de represión dictatorial que sucedió al conflicto bélico. Son los datos que manejan los responsables de la asociación, según comunicó ayer su vicepresidente Santiago Macías, que destacó la solvencia del archivo de desaparecidos que maneja la organización basada en denuncias y reclamación de los familiares y completada en todos los casos con detalles extremos sobre las condiciones que rodearon la desaparición de los represaliados. «Nuestra documentación está avalada por los familiares; hay siempre una familiar que se persona como promotor de la búsqueda», aclaró Macías, que destacó el notable peso de la provincia de León entre el censo de desaparecidos que la ARMH maneja a nivel nacional. Sin ajustar el cálculo a un porcentaje concreto, Macías se muestra en condiciones de asegurar que este territorio encabeza la lista de peticiones de investigación entre el elenco de las que se pueden remitir a la Audiencia nacional, en cumplimiento del auto dictado por el juez Baltasar Garzón. El movimiento judicial ha multiplicado de forma casi exponencial las iniciativas de los familiares de represaliados para iniciar los trámites de búsqueda de los desaparecidos. La correspondencia remitida al apartado de correos que la Asociación para la recuperación de la Memoria Histórica es un buen ejemplo de que la tragedia social de los muertos en las cunetas, en fosas clandestinas, era algo más que una anécdota. «Recogemos la documentación por sacas», relata de forma expresiva Macías, cuando alude a la ventana del apartado de correos de Ponferrada que se mantiene como nexo de unión de la ARMH y los herederos de los desaparecidos desde el 36. Nueva fosa en la Valdería La Asociación para la recuperación de la Memoria Histórica multiplica la actividad de sus voluntarios en varios frente de trabajo, que van más allá de los planes concretos de las exhumaciones de fosas. En este ámbito, están a punto de iniciar una nueva búsqueda de restos de represaliados enterramientos clandestinos localizados en el Pinar e Pinilla de la Valdería, un paraje en el que fueron asesinados varios grupos de bercianos. Cinco podrán ser rescatados y devueltos a sus familiares la próxima semana, si fructifican las previsiones de trabajo de la asociación. A pocos metros de esa fosa se halla otra sepultura. Es parte del trabajo a corto plazo de la ARMH que abarca trámites más amplios en su trabajo -la documentación, por ejemplo- para ayudar a quienes buscan a los suyos.