Un sistema de garantía seguro

La Comisión Europea debate la necesidad de incrementar la seguridad de los ahorradores ante posibles quiebras de entidades financieras, en un momento de desconfianza absoluta de los mercados y de inquietud ante las espectaculares debacles de Estados Unidos. España es uno de los países en las que las entidades financieras tienen que dotar con una cantidad más pequeña los depósitos que les confían los ahorradores; sin embargo, su sistema permite disponer del dinero líquido de manera inmediata y es, según un informe de la Comisión Europea, el más seguro del continente junto con Portugal. El Fondo de Garantía de Depósitos permitiría afrontar hasta una crisis «media» del sistema financiero nacional, algo que sólo ocurriría en estos dos países. Una crisis de las denominadas graves sería insuperable por ningún sistema actual; pero a lo largo del último siglo no se ha producido nunca una situación de este tipo. El Fondo de Garantía de Depósitos es una especie de hucha a la que las entidades financieras aportan dinero a medida que captan los ahorros de los ciudadanos. Sirve para garantizar que los ahorradores tendrán su dinero aunque la entidad en la que tengan sus ahorros tenga serios problemas. A finales del año pasado esta «hucha» disponía de más de 6.500 millones de euros. Según la legislación española en este campo, si una entidad quebrara devolvería de este fondo 20.000 euros como máximo a cada titular de una cuenta. En otros países este límite es más alto, pero en realidad el sistema no es más seguro: las entidades no tienen ya desembolsado el dinero en forma de provisión, como ocurre en España; sino que tienen un compromiso con sus gobiernos para devolver las cantidades en caso de quiebra. Compromiso frente a dinero.