«No hay pruebas, hay que absolver»

Los letrados defensores de los acusados siguieron parecidos discursos: «No hay pruebas, el atestado policial no es válido porque no ha sido ratificado para el juicio, el informe fisonómico, tampoco. No han aparecido huellas y la cinta de video que registra supuestamente los hechos no tiene fecha del día de autos sino del siguiente, tampoco es válida. No se ha realizado prueba de ADN y los propios testigos han incurrido en contradicciones entre ellos. Hay que tener en cuenta el principio de presunción de inocencia y que todo está basado en suposiciones, no hay ninguna prueba firme. Tantas dudas solamente pueden ofrecer una sentencia absolutoria».