Los contratos de la línea del AVE a León retrasan su llegada al menos hasta el 2011

El Ministerio de Fomento aún tiene que preparar el terreno para construir 175,86 kilómetros de vía, dotar a la infraestructura de las medidas de seguridad necesarias, electrificarla y señalizarla si quiere consolidar la llegada del AVE a León, prevista para el 2010, pero que no estará, al menos, hasta el 2011, según los plazos marcados en los contratos de obra. De los 16 subtramos en los que se divide el proyecto ferroviario para unir a Valladolid con la ciudad no hay ninguno terminado y sólo en dos ha comenzado ya la construcción de la plataforma. Uno más está adjudicado y el resto duerme en redacción de proyecto. El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias, Adif, resolvió hace cinco meses el contrato entre Grijota y Becerril de Campos y Río Cea y Bercianos del Real Camino, pero las máquinas no entraron a acondicionar el terreno hasta el 30 de septiembre. Antes, los topógrafos realizaron las mediciones pertinentes y los operarios recopilaron el material necesario con el que preparar la zona. El 26 del mismo mes, Adif anunciaba la concesión en el ramal que va desde Onzonilla a la terminal de trenes, que no comenzará a ejecutarse hasta diciembre o enero del año próximo, según los plazos seguidos en los otros sectores de la línea. Entre los tres suman tan sólo 25,5 kilómetros del corredor noroeste y un periodo de construcción, únicamente para el soporte, de 19 meses en cada uno de ellos, por lo que este capítulo del proyecto no estará cerrado al menos hasta mayo del 2010, si las empresas cumplen con lo acordado. Después llegará la licitación de todo lo referido a la obra civil, que podrá hacerse mientras finalizan los trabajos de plataforma, y más tarde su adjudicación. Con estas pautas, el compromiso público no será una realidad hasta bien entrado el 2011, si se comparan los tiempos para esta línea con los del tendido Madrid-Segovia-Valladolid, abierto al tráfico el 23 de diciembre del 2007. Sin empezar Evidencia el retraso que el 87% de la infraestructura del AVE Valladolid-León esté aún sin adjudicar. Entre el anuncio del concurso y la concesión del pliego suelen pasar cerca de cuatro meses. Resulta entonces difícil que en este año se publiquen más movimientos de tierra en otros tramos, más allá del que entra en León. El presidente de la entidad pública responsable de estos trabajos, Antonio González, comprometió que toda la línea estaría en marcha en el 2009, aunque no avanzó nada sobre su puesta en funcionamiento. Nadie del Gobierno fija fechas en este sentido y ni el presidente José Luis Rodríguez Zapatero ni la ministra Magdalena Álvarez arriesgan marcar en el calendario público la entrada de la alta velocidad a la capital leonesa. Antes sí lo hicieron; ambos reiteraron que la línea estaría operativa en el 2010, algo poco probable. Los documentos la alejan Los últimos impulsos a la infraestructura, que hasta hace un par de semanas sólo tenía recorrido en los despachos gubernamentales, y los tiempos grabados en los documentos contractuales alejan la llegada del AVE a la ciudad hasta, por lo menos, el 2011. Uno de los últimos contratos del Adif, el del control de la seguridad de las obras en toda la línea, tiene un plazo de ejecución de 40 meses, y no vence hasta septiembre del 2011. La empresa adscrita a Fomento recalcó, cuando impulso este concierto, que los trabajos en el enclave son los «óptimos» y mantuvo el 2010 como la fecha en la que terminarían. Adujo que los trenes podrían circular por la línea aunque faltaran tareas menores como la reposición de servidumbres o caminos afectados. Sólo cuando todos los ramales estén en fase de obras se podrá fijar con certeza la llegada de la alta velocidad, pero los ritmos burocráticos actuales imposibilitan que ésta sea una realidad en los próximos dos años.