El rechazo al Plan Bolonia paraliza la educación en el bachillerato leonés

Más de doscientos estudiantes de secundaria tomaron ayer las calles de León como medida de protesta contra la adaptación de la Universidad al Espacio Europeo de Educación Superior, o Plan Bolonia, «que sienta las bases de una privatización encubierta al dividir la formación en grados y postgrados, estos últimos el doble de caros que la matrícula ordinaria de un curso». Así explicó el portavoz de la Alternativa Estudiantil Universitaria -AUE-, organización pendiente de regularizar, Samuel Álvarez García, el principal motivo de la huelga de ayer, que paralizó la enseñanza en el Bachillerato de la provincia, cuyos escolares -en la pública- la secundaron en un 80%. En la ESO el apoyo al paro fue del 30%, según la información facilitada por la Junta. Con las clases casi vacías, los estudiantes se concentraron a las doce de la mañana frente al Ayuntamiento y desde allí recorrieron el centro de la capital -cortaron el tráfico- hasta llegar a la Dirección Provincial de Educación y al rectorado, donde permanecieron varios minutos proclamando consignas contra la adecuación de las titulaciones al nuevo marco académico. En el campus de Vegazana la queja fue menos ruidosa y sólo afectó significativamente a los estudiantes de la Facultad de Derecho, que protagonizaron una sentada de treinta personas. Esta respuesta desaprobatoria a los programas de la administración aparece porque en los grados «sólo se abordarán los conocimientos básicos», algo rechazado por Samuel Álvarez y por el resto de compañeros que respaldaron la marcha. «Creemos que esa no es formación suficiente para salir al mercado laboral», explicó este joven, quien además recordó como este tipo de divisiones «creará trabajadores precarios». Otro de los aspectos que critica este alumno del tercer curso de Biotecnología en la ULE está relacionado con los criterios de evaluación: «Valorar la capacidad de liderazgo o como habla uno en público no tiene base científica y esta tarea debe competer a las empresas». La convocatoria de ayer partió del Sindicato de Estudiantes, pero al no tener representación en la capital leonesa ésta tuvo aquí un origen espontáneo. «El próximo día 13 de noviembre está prevista una nueva huelga, que irá precedida de una campaña informativa y de una manifestación a las once y media de la mañana desde la plaza de Botines», aclaró Samuel Álvarez. La asociación a la que pertenece celebrará el diez de noviembre una charla , en el Aula Magna de Biológicas, para «profundizar» en las causas de las movilizaciones. Las de ayer afectaron a todo el país y las protestas alcanzaron a 30 ciudades de España.