Los oponentes a la Sama-Velilla creen que las eléctricas controlan la política

Tras más de veinte años de intentos fallidos y nueve proyectos corregidos, la intención de construir el corredor de alta tensión entre Asturias y Palencia sigue en pie. Y la oposición al paso de la línea por León, también. La montaña leonesa, las plataformas vecinales federadas para detener la autopista eléctrica -que se extendería por 87 kilómetros del norte leonés, dieron ayer un nuevo paso: «Queremos que el servicio de asistencia a municipios de la Diputación nos preste el asesoramiento que necesitamos para entrar a la vía jurídica a tratar de detener allí el proyecto», anunciaron ayer representantes de las asociaciones que desde hace tres años se han enfrentado la intención de Red Eléctrica Española, la Junta, el Principado de Asturias y el Gobierno de España de hacer un pasillo por la montaña leonesa para llevar energía de las centrales de Sama (Asturias) a Velilla del Río Carrión (Palencia). La salida de los tribunales se ofrece como única posible «tras el engaño al que han intento someternos los políticos, las empresas y las instituciones», comentaron los representantes de las plataformas. En ese sentido, advirtieron: «En las comarcas de la montaña leonesa afectadas por el trazado eléctrico están censadas 19.000 personas; y hemos presentado 27.500 alegaciones, que no han querido ni mirar. Así es que queremos recordar a los políticos que están ahí gracias a los ciudadanos y que se deben a los ciudadanos, no a las eléctricas, como en este caso». Las asociaciones contrarias a la alta tensión se declararon ayer «toreados» por los políticos que dijeron lo contrario a lo que hacen ahora antes de las elecciones de marzo. «Otra vez los tontitos de León» «En este punto, desenterraremos el hacha de guerra; si las administraciones y los políticos no respetan la ley, nosotros tampoco lo haremos. Las torretas lo mismo que se levantan se tiran», retaron a las fuerzas políticas, gobierno autonómicos y Gobierno estatal que avalan el proyecto de evacuación energética entre Asturias y Palencia a través de León. «Lo que no va a ser es otra vez que paguen los tontitos y los pobres de León; que lleven el proyecto por Santander, en vez de faltarnos al respeto a nosotros», protestaron para revelar las consecuencias nefastas que para el desarrollo de la provincia conllevará el tendido a lo largo de 87 kilómetros. ¿Turismo? Se preguntan cómo encajar la incongruencia de políticos autonómicos que por un lado prometen salvar el medio ambiente y desarrollo sostenible de la montaña, y por otro acceden a la alta tensión. «¿Cómo vamos a desarrollar el turismo con una autopista de alta tensión sobre nuestras cabezas? ¿Cómo de permiten decirnos que van a plantar pinitos y reforestar mientras permiten destruir bosques centenarios para instalar torres de alta tensión». Las movilización será inmediata; volverán las pancartas en la calle, mientras llega el turno de los tribunales.