La primera vía férrea privada mueve el carbón de la térmica de La Robla
El incremento de la relación comercial entre el puerto de Gijón y las empresas de Castilla y León en los últimos años se ha centrado en el movimiento de mercancía general contenerizada. Esta potenciación económica de Gijón como puerto natural de salida de las mercancías de las diferentes provincias de Castilla y León -especialmente desde León-, se suma a la tradicional relación entre El Musel y el norte de la comunidad para mover el tráfico de carbón necesario para la producción de electricidad en las centrales térmicas de la zona que son propiedad de Endesa, como la de Compostilla, o de Unión Fenosa, como en el caso de las existentes en Anllares y La Robla. Este tráfico de carbón también afecta a la central palentina de Guardo. Los principales exportadores de carbón a través del puerto de Gijón hacia las diferentes térmicas de Castilla y León son Australia, Sudáfrica, Estados Unidos, Colombia y Rusia. A estos cuatro países se les ha unido más recientemente Indonesia. Estas adquisiciones de carbón de otras nacionalidades está directamente relacionada con el problema de las emisiones de CO 2 a la atmósfera, ya que el mineral que llega de esos países genera menor contaminación. La importancia del tráfico de carbón a través del puerto de El Museo hacia la provincia leonesa, generó incluso la apertura de una nueva infraestructura para facilitar ese gran volumen de mineral con destino, especialmente hacia la térmica de La Robla. Líder en tráfico desde el tren En concreto, el puerto de Gijón dispone desde julio del 2007 de la primera línea privada de ferrocarril, que se emplea para poder mover las 2.000 toneladas con destino a La Robla, que pasan por esta infraestructura marítima asturiana. El tren es operado por la empresa Acciona Rail. Y es que el puerto de El Musel es el primero en España por tráfico de mercancías en modo ferrocarril, por lo que acoge líneas de Renfe, de Feve Acciona, Comsa y Construrrail. Para La Robla, el puerto de Gijón también mueve a diario miles de toneladas de clínker, en este caso para su cementera.