El edil se marca ahora como plazo para el desarrollo de la iniciativa el próximo ejercicio
La red wi-fi lleva 10 meses de retraso sin que Abel Pardo curse las licencias
La concejalía abrió el sistema en julio y lo cerró pocos días después por orden judicial
Sin cables, sí, pero sin licencias, no. El proyecto de instalación de redes wi-fi para disponer de conexiones gratuitas a internet en zonas públicas de la ciudad se mantiene en pausa desde principios de año: primero se apeló a la necesidad de aprobación de los presupuestos, para poder consignar los cerca de 11.000 euros de coste, y luego se decidió poner en marcha la iniciativa por la vía de hecho, sin contar con los permisos pertinentes. Entonces, ante la denuncia presentada por Ecologistas en Acción, el juzgado de lo contencioso-administrativo decretó la paralización cautelar. Y en esas se mantiene, sin que la Concejalía de Nuevas Tecnologías, dirigida por Abel Pardo, haya avanzado nada desde que a mediados del mes de julio el juez puso el candado a las emisiones. Para el año que viene, concede ahora el edil leonesista, más de diez meses después de que lo anunciara como una de las actuaciones principales de su área para el 2008. La tramitación, según explicó el edil responsable de la Concejalía de Nuevas Tecnologías, pasa por lograr el permiso de la comisión de Patrimonio, debido a la implantación de su primera fase en diferentes zonas del casco histórico, y la licencia de medioambiente, para lo que no se ha movido todavía ni un solo papel que atestigüe que la red wi-fi tiene posibilidades de estar en funcionamiento en el corto plazo. «Hay que hacer el expediente de cara al año que viene», emplaza Pardo, quien explica que los técnicos de su área «están mirando cómo lo han hecho en otras zonas del Estado para llevarlo bien cerrado y superar las alegaciones que puedan presentarse», como las que ya plantearon en la anterior intentona de implantación grupos ecologistas, que mantienen que las emisiones de los dispositivos pueden suponer un riesgo para la salud de los ciudadanos y que acudirán a la justicia para revocar la instalación de los emisores de señal de internet. El inicio de los trabajos de tramitación administrativa se sucede con casi medio año de retraso desde que a mediados de julio el juzgado de lo contencioso administrativo decretara la paralización cautelar y marcara la necesidad de que el proyecto cuente con las licencias oportunas, que se habían obviado por parte de la concejalía que dirige Pardo al pensar que, como se trata de una iniciativa promovida por el mismo ayuntamiento, no necesita pasar los filtros que requiere cualquier particular; un error en el que han caído otros proyectos municipales como el párking subterráneo de la plaza de la Inmaculada que intentó construir el anterior gobierno local del PP. Un año perdido Hasta el momento en el que culminen los trabajos de preparación de los papeles en los despachos para que se concedan las licencias, y pendiente de la promesa de Pardo, permanece la red wi-fi en el aire. En el 2008, el proyecto tenía una programación trimestral de implantación: primero, en las plazas del casco histórico; luego, en el barrio de La Inmaculada; más tarde, en el antiguo Colegio de Huérfanos Ferroviarios (CHF); y antes del 2009, en algunos parques y jardines, como Quevedo o San Francisco. Sólo era una primera entrega, que sería completada a lo largo del presente mandato, que culmina en el 2011. Pero, casi en diciembre, se piensa lo mismo. Lo mismo que se pensaba hace un año, aunque, por lo menos, ahora se sabe que son necesarios los permisos aunque se trate de una administración.