| Crónica | Lo prometido es deuda |
El comercio justo equilibra la balanza
El centro Don Bosco y el colegio padre Manjón realizaron ayer un gesto conjunto para reclamar prácticas más justas con los países empobrecidos
Participantes en el gesto a favor del comercio justo en el centro Don Bosco de Armunia
león
¿Sabes que la suma de créditos, ayudas e inversiones que realizan los países del norte en los países empobrecidos es menor que la cantidad que cobran por el pago de la deuda externa?, ¿Sabes que España contrajo en 1972 el compromiso de dedicar el 0,7 de su producto interior bruto y aún no lo cumple?, o que ¿los comerciantes se llevan un 25% del coste del café, el tostador el 64% y el agricultor un 2 por ciento?
El plato de las injusticias amenazaba ayer en el centro Don Bosco con inclinar a su lado la balanza, pero, poco a poco, las aportaciones del alumnado de este centro de secundaria y del colegio Padre Manjón de Armunia fueron equilibrando el fiel con la carga del consumo responsable, el comercio justo, y los compromisos reales que ya han adquirido algunos países: Luxemburgo, Noruega y Suiza, que ya cumplen el 0,7% se han propuesto alcanzar el 1% de sus PIB en programas de ayuda al desarrollo; España ha dado la fecha del 2012 para alcanzar el 0,7%; la banca ética, aunque parezca mentira y sea minoritaria, también existe: Triodos Bank y Fiare son dos ejemplos en España.
El gesto a favor del comercio justo, aderezado con la degustación de un chocolate, fue promovido por la organización de desarrollo Jóvenes del Tercer Mundo, vinculada a la familia salesiana, y que desarrolla su campaña anual de sensibilización pública bajo el lema «Lo prometido es deuda» para reclamar el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo del Milenio y más en concreto del objetivo 8.