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| Reportaje | Para los que no estaban |

Ir al colegio: derecho y obligación

El Ayuntamiento celebra la Constitución con la lectura por parte de 32 escolares de los colegios Leonés y Camino del Norte de los artículos que consagran la igualdad de derechos

Fernández estuvo rodeado de pequeños

Publicado por
A. Caballero
León

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Que haya clase un sábado a las diez de la mañana debe tener algo de dictadura. De los tiempos en los que «unos que gobernaban no dejaban que les dijeran nada», como les explicó el alcalde de León, Francisco Fernández, a los 32 escolares de los colegios Leonés y Camino del Norte, quienes compartieron el acto conmemorativo de los 30 años de la Constitución. Esa «ley que reconoce las obligaciones y los derechos». «Por ejemplo, que tenéis que ir al colegio, pero que podéis ir al colegio», como detalló el regidor socialista, rodeado de pequeños que se arrellanaban en los sillones que en día de Pleno ocupan los concejales y los funcionarios. «El futuro», señaló con la mano abierta en arco hacia los estudiantes; y «el pasado, que sois vosotros», lanzó el dirigente municipal a los concejales que estaban entre el público.

La lección la completó el joven diputado del PSOE por León, Diego Moreno. «Nosotros no estábamos, pero tenemos que agradecerles que tengamos una Constitución», citó el socialista, quien nació casi un año después de que se sancionara el texto que recoge «las normas básicas de convivencia, a partir de las cuales se desarrollan las demás». Ducho en el manejo oratorio, el secretario de Juventudes Socialistas de la provincia describió que su trabajo consiste en «escuchar e intentar comprender las inquietudes de los leoneses para luego trasladarlas y buscar soluciones en el parlamento». Lo mismo, sin el último paso, habían hecho los niños, quienes tomaron la palabra para leer varios artículos del texto constitucional que consagran la igualdad de derechos de los ciudadanos. Casi al final, el alcalde le chivó a quien hacía, a su derecha, las veces de tenientes de alcalde: «Hay chocolate». Para todos, como hace 30 años, aunque entonces iba a ser café.