Cada leonés redujo su consumo de agua diario en 13 litros en el 2006
dl | león
Los hogares de León rebajaron en el 2006 su consumo de agua un 8,8% a pesar de que en los últimos diez años el gasto por habitante y año ha aumentado en un 17%. Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), en 2006 cada leonés gastó 147 litros al día, trece menos que el año anterior, pero 22 más que al comienzo de la serie, en 1996.
Así se desprende de los «Indicadores sobre el Agua» recogidos entre los años 1996 y 2006. Una serie de datos que toman como referencia el padrón municipal a 1 de enero de cada año para analizar diferentes aspectos relacionados con el agua, como el volumen disponible, la captación, el agua abastecida a los hogares o las pérdidas en la red de distribución.
El volumen de líquido destinado a otros usos aumentó sólo en dos litros por habitante y día al año, pasando de 101 a 103. Sin embargo, en este punto se aprecia un descenso significativo en la última década, de diez litros por día y habitante al año, ya que en 1996 el gasto era de 113.
En la comunidad, el volumen de agua disponible llegó en 2006 a los 409 litros por ciudadano al día, frente a los 406 del año anterior y lejos de los 357 a los que cada castellano y leonés tenía acceso hace diez años.
La mayor parte del agua que se consume en la comunidad procede de las aguas superficiales. En 2006, el agua captada fue de 213 litros por habitante y día, dos más que el año anterior. Este porcentaje ha variado poco en la última década, ya que en 1996 el volumen de agua captada de las aguas superficiales por ciudadano cada día fue muy similar, con 211 litros.
Menos pérdidas
La captación de aguas subterráneas logró bajar el año pasado de los 68 a los 54 litros, pero en el conjunto de la serie se aprecia un aumento considerable, de quince litros, sobre los 39 contabilizados en 1996.
La naturaleza fue más generosa en 2002, cuando el volumen de aguas superficiales llegó a los 259 litros por residente y día, gracias a lo cual la toma de aguas subterráneas se redujo a 38 litros.
Un dato positivo es que las pérdidas de agua en la red de distribución han ido descendiendo a lo largo de los últimos años. En estos momentos, se pierden 52 litros por habitante al día, una cifra todavía elevada pero muy alejada de los 72 que se contaban en 1996. También es positiva la reducción de pérdidas detectada sobre 2005, cuando se perdieron 63 litros.