Hidalgo accede a la Alcaldía de Sariegos con una oferta de diálogo

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Como estaba previsto, Juan Carlos Hidalgo se convirtió ayer en el nuevo alcalde de Sariegos con los votos de los cinco concejales populares y el apoyo leonesista. El nuevo regidor valoró el gesto de la oposición, que se abstuvo en la investidura en lugar de votar en contra, y les dedicó sus primeras palabras.

«Estoy dispuesto a hablar y a dialogar -”indicó-”. Quiero ser el alcalde de todos, tanto de los que votaron al PP, como de los que no». También les pidió «un esfuerzo de colaboración» para alcanzar los 5.000 habitantes y para culminar las tareas que ya se han emprendido esta legislatura. Otro de sus retos será mantener los servicios que se dan al ciudadano y acercar la administración a los vecinos.

El PSOE y Sariegos Despierta reconocieron que desde que el anterior alcalde, Ismael Lorenzana, había dimitido el pasado 9 de diciembre, «ya se notaba un cambio de talante», y expresaron su deseo de que, a partir de ahora, se les tenga más en cuenta.

Sin embargo, durante el pleno de toma de posesión se produjo el primer rifirrafe dialéctico entre el portavoz de Sariegos Despierta y el recién nombrado alcalde. Carlos Enrique Espeso aprovechó su turno de palabra para ahondar en el «talante autoritario y despótico» que, a su juicio, tenía Lorenzana, al que también acusó «de usar el cargo en beneficio propio, haber salido por la puerta de atrás y no haber cumplido su programa».

Cuestión de puertas

Juan Carlos Hidalgo le interrumpió para remarcar que Lorenzana se marchó con el 100% del programa cumplido, de modo «que a mí sólo me faltarán los remates», y para desmentir que el ex regidor hubiera salido de mal modo, «se marchó por la puerta grande», replicó. El enfrentamiento verbal se zanjó tras admitir Carlos Enrique que no tenía «ganas de polemizar».

Al acto acudieron el presidente de UPL, Javier Chamorro, y el diputado popular Marcos Martínez.