El Ayuntamiento facilitará compost a los empadronados que colaboren depositando sus restos
Villaquilambre abrirá una planta para reciclar las podas y el césped
Medio Ambiente invertirá más de medio millón en una trituradora y nuevos contenedores
villaquilambre
Villaquilambre estrenó el pasado verano una treintena de contenedores de color naranja destinados a recoger los restos de las podas y las siegas de los jardines públicos y privados. Ahora, el Ayuntamiento quiere dar un paso más para autogestionar esos residuos y, por eso, proyecta la apertura de una mini-planta en la localidad de Villaobispo de las Regueras.
El recinto dispondrá de varios silos de hormigón para depositar y tratar las hierbas, ramas y arbustos que se hayan recogido y que se transformarán en compost gracias a un proceso con enzimas y agua. La idea municipal, según expresó la concejala de Medio Ambiente, Manoli Ordás, es «entregar gratis ese compost a los particulares que estén empadronados en Villaquilambre y que hayan colaborado depositando los restos de las siegas y las podas en los contenedores».
De ahí que su concejalía vaya a solicitar otros quince recipientes especiales para colocarlos en los puntos más necesarios del municipio. Cada uno de esos contenedores naranja cuesta 2.350 euros al estar fabricados con una chapa especial galvanizada, tapa de plástico y pedal de apertura. Su capacidad es de 4.000 litros. La concejala reconoce que algunos de los instalados carecen del pedal, pero ese defecto se subsanará antes de la campaña de siega que arranca en abril.
Maquinaria para triturar
Otro de los pilares para poder realizar gestionar esos residuos voluminosos es adquirir una trituradora con remolque capaz de partir los restos más duros, como las ramas de los árboles. Ordás ya ha solicitado que los presupuestos del 2009 incluyan una partida de 20.000 euros para esa maquinaria. Ordás insiste en que el objetivo es «autogestionar los restos de siega y poda del municipio, que hasta ahora trataba Gersul y nos los devolvía en forma de compost».
La pasada primavera también se empezaron a distribuir contenedores individuales de vidrio a los establecimientos hosteleros con un sistema de enganche especial que facilita el vertido directo del vidrio a los iglús verdes. Medio Ambiente estudia abrir un segundo punto limpio en el municipio.