La lata amiga
Hace muy poco tiempo en España, en una ciudad llamada León, una niña llamada Lucia compró una lata de refresco.
La niña bebió el contenido de la lata y la tiró a la papelera, pero su amiga Ana, cuando se bebió la suya, no la tiró a la papelera y se la dio a unos niños que se la pidieron, para jugar al fútbol.
Entonces Lucía la dijo que eso estaba muy mal y de pronto se oyó a la lata decir: -œsocorro, socorro que alguien me ayude pues estos niños me están triturando a patadas-. Lucia que oyó los gritos de socorro de la lata, fue quitársela a los niños y la tiro a la basura.
Los niños volvieron a cogerla de donde ella la había tirado y ¿cual fue su sorpresa?
Lucía volvió a oír los gritos de socorro de la lata de refresco.
Entonces Lucia se la quito de nuevo a los niños y pensándolo mejor decidió tirarla al contenedor amarillo de reciclado y al hacerlo sintió como si al caer con su sonido la lata la diera las gracias por haberla salvado, pues sabía que con ese gesto podría volver a ser utilizada de nuevo por otra persona.
Un tiempo después su amiga Ana compro una lata de refresco y como por arte de magia pareció decirle: ¿está a tu lado tu amiga Lucía?. Ella le contestó ¿por qué me lo preguntas?
La lata le contestó: porque un día ella me salvó la vida y quería agradecérselo.
Ana le llevo la lata de refresco a su amiga y esta se llevó una gran sorpresa. A partir de ese día tanto Ana como Lucía y todos los demás niños del barrio decidieron reciclar todas las latas en el contenedor debido y así es el reciclado.
Víctor Chamorro Fernández
6.º A. Camino del Norte
León