Don Limpín y Don Puerquín y el basurero que quedó limpín
Había una vez un gato llamado don Limpín que vivía cerca de un basurero. Don Limpín, era muy limpio le gustaba tener la basura organizada, en unos contenedores ponía el papel, en otros vidrios y en los más lejanos a su casa para evitar la contaminación ponía la basura orgánica. Pero tenía como vecino a un cerdo llamado don Puerquín, desaseado y sucio que no le importaba cómo estaba la basura. Un día don Limpín al salir de su casa se encontró con don Puerquín
Don Limpín.- Buenos días don Puerquín
Don Puerquñin.- Buenos días don Limpín
Don Limpín.- Dónde va usted tan deprisa
Don Puerquín.- Voy al médico de urgencias, me han salido muchos granos por el cuerpo.
Don Limpín.- ¿Qué me dice y porqué ha sido?.
Don Puerquín.- Ha sido desde ayer cuando salía de mi casa, he resbalado con un plátano y más basura que había a la puerta de mi casa y han comenzado a salirme granos por todo el cuerpo.
Don Limpín.- No me extraña don Puerquín a la puerta de su casa tiene usted siempre mucha basura, si usted la recogiera en los contenedores apropiados, no se habría resbalado y no tendría que ir hoy al médico.
Don Puerquín.- Tiene razón don Limpín a partir de ahora organizaré la basura siempre en cada contenedor y así evitaré la suciedad y los posibles accidentes.
A partir de ese día don Puerquín y don Limpín tenían más limpias la zona cercana de su casa (aunque vivían cerca del basurero) y don Puerquín no volvió a tener que ir al médico.
María Alonso Moro
6.º A. Camino del Norte. León