El nuevo contrato de limpieza evitará que el aumento salarial tenga que asumirlo el consistorio

a. c. | león

Menos concreción tiene el plazo para la entrada en funcionamiento del nuevo contrato de limpieza, mientras el Ayuntamiento arrastra una deuda de más de 60 millones de euros, a lo que se suma una factura de más de 1,3 millones mensuales durante la prórroga de la prestación. Ahora, «la consultora Deloitte está haciendo un estudio del servicio intentando ver dónde se pueden reducir costes», antes de la redacción de los pliegos de concesión, en los que el Ayuntamiento sí tiene claro que intentará «reducir el coste anual, que es de cerca de 17 millones de euros anuales, pero sin perder el nivel alcanzado, que es uno de los más altos de España» y con la obligación de que la concesionaria asuma a los trabajadores, según explica Chamorro.

El camino para lograr la contención de este canon anual -”que pasó de 6 millones en la privatización inicial de 1992 a los 17 millones actuales-” pasa por que «los costes a mayores, tanto en material como en personal, sean asumidos por la empresa y no repercutidos como ahora al Ayuntamiento», ya que «el beneficio industrial está hecho para que, cuanto más gasta la empresa, más gana». «Esto es un contrasentido, porque tenemos claro que los intereses municipales deben estar por encima de otras fórmulas de gestión», concede el edil de la UPL, quien es consciente de que «la reducción es muy difícil hacerla, porque la masa salarial es muy alta e intocable, además de la parte más sustancial del contrato», pero mantiene que no se puede alcanzar situaciones como las de años pasados, en los que la empresa aplicó subidas anuales de nóminas de hasta el 20% negociadas con los trabajadores y que debió asumir sin más el consistorio.