La UPL fija que León pierde al año 200 millones al estar con Castilla

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En el «vodevil» del pacto anticrisis suscrito por PSOE y PP de León, «el tercer partido de la provincia», saltó ayer de espontáneo a escena para reclamar a los dirigentes socialista y popular, Francisco Fernández e Isabel Carrasco, que «dejen de hacer el ridículo, que dejen de ser unos irresponsables que están faltando al respeto a los miles de leoneses que están sufriendo la crisis económica; y que busquen soluciones, que no es malo, pero que lo hagan sin foto fácil», como planteó el presidente de la UPL, Javier Chamorro, quien les recomendó que «trabajen con discreción y cuando tenga una solución a un problema concreto la presenten, pero no al contrario».

La crítica leonesistas parte del análisis de un pacto al que «la UPL no fue invitada», como sería «lógico», pero ante el que se quedó «expectante, entendiendo que lo importante era ver en qué quedaba y que soluciones daba el pacto». Ahora, «tras la primera reunión, en la que no hubo ni siquiera orden del día», y las dos crisis sufridas por «las discusiones entre Fernández y Carrasco», queda demostrado que «están buscando la foto fácil, una de las innumerables fotos de pacto, plataformas y mesas que ha sufrido esta provincia y que termina en nada, una vez más».

Y como «parece que lo único que buscan es la foto», la UPL les propuso ayer «una serie de problemas, como ejemplo, que la provincia tiene y arrastra desde hace tiempo: la Facultad de Medicina, la estación de esquí de San Glorio, la autovía Ponferrada-La Espina, la línea de alta tensión Sama-Velilla, la eliminación del peaje de la León-Astorga o la León-Campomanes, la autovía León-Braganza, el circuito de velocidad de La Bañeza, la autovía León-La Robla, la autovía Cistierna-Mansilla, los Fondos Miner».

Que no generen frustración

La enumeración de reivindicaciones la remató Chamorro con la propuesta, que deben trasladar Fernández y Carrasco a Gobierno y Junta, respectivamente, de que «abonen la deuda histórica, como han hecho en Andalucía, contraída con León, Zamora y Salamanca por haber sido integrados en una comunidad que les ha destrozado su tejido empresarial, industrial o comercial». «Sólo en León, en un cálculo aproximado por población y superficie, se estima que la provincia pierde cada año por pertenecer a esta comunidad 200 millones de euros anuales. Si lo multiplicamos por 30 años, nos sale la abrumadora cifra de 6.000 millones de euros. Me gustaría que nos dijeran que van a arreglar los perjuicios de inclusión de León en la comunidad por unos supuestos derechos de Estado», explicó el presidente de la UPL, quien insistió en que «primero trabajo y luego fotos». «Que se busquen por debajo porque están generando más frustración en una sociedad muy castigada desde hace años», cerró.