La llegada de la alta velocidad y las nuevas autovías son los principales retos para el ministerio
León fía el avance de infraestructuras a la entrada de Blanco en Fomento
El alcalde considera «una cierta ventaja» el conocimiento del noroeste que tiene el nuevo ministro
león
Cuenta la leyenda política -”esa que puede ser cuento o epitafio, según tiempo y necesidad-” que cuando Zapatero era bachiller en la Carrera de los Jerónimos viajaba acompañado de José Blanco a las reuniones del Congreso. Lugo-León-Madrid. Un eje de comunicaciones que el nuevo ministro de Fomento se sabe de memoria; tanto, como las carencias que acumula el noroeste peninsular. Un leonés otorga la cartera a un gallego y la provincia leonesa, en el medio. Si sube o baja, depende de ellos; no es un chiste.
La entrada de Blanco en Fomento se saluda en la provincia no sólo por la salida de Magdalena Álvarez -”«tanta paz lleva como deja», aplaudían el martes los socialistas leoneses-” sino por su sintonía con los proyectos que están en marcha o que requieren de un impulso para no quedarse en los cajones: la llegada de la alta velocidad y su integración urbanística en la capital, el desarrollo de la León-Valladolid, la confirmación de la autovía Toreno-La Espina, el abandono de las ambigüedades en el respaldo para la León-Braganza o el asentamiento de la apuesta del aeropuerto de La Virgen del Camino como nudo en el noroeste, amén de otras iniciativas contempladas en presupuestos, como el Acceso Sur o la León-La Robla. «Una cierta ventaja», como analizaba ayer el secretario del PSOE leonés y alcalde de la ciudad, Francisco Fernández, quien alababa la figura del político gallego como «una persona que conoce la necesidad de que la alta velocidad esté cuanto antes aquí».
Por el momento, el gesto del nuevo ministro ha sido calificar como «hoja de ruta» el Plan Estratégico de Infraestructuras y Transportes (Peit) -”algo como que diga el obispo que seguirá la Biblia-” y nombrar jefe de gabinete a Carlos María Juárez Colera, quien era director técnico en la Sociedad Estatal de Infraestructuras del Transporte (Seit), lo que es una apuesta por el papel de esta herramienta para dar un mayor protagonismo a la iniciativa privada en la gestión de los proyectos. Hay 31.000 millones de euros y Blanco siempre se ha caracterizado por su habilidad para repartir cartas.
Menos relevante es el cambio en Cultura, donde el proyecto para convertir el Emperador en el Centro Nacional de las Músicas Históricas y las Artes Escénicas «está cerrado», como definió el alcalde, quien no hizo mención al Plan Director de la Muralla, que ha sido presentado en Madrid y necesita de apoyo. En León, se confiaba en Antonio Muñoz Molina, sobre todo por su jefe de gabinete, el leonés Javier Lanza, y ahora se espera que la entrada de Ángeles González Sinde no derive las iniciativas leonesas a una cámara oscura.
El resto de cambios: Gabilondo en Educación, Salgado en Economía, Jiménez en Sanidad y Chaves en Política Territorial, no tienen una incidencia directa sobre los proyectos de la provincia leonesa. «No tenemos inconveniente», analizó Francisco Fernández, quien incidió en que las iniciativas ya están fijadas. De aquí al 2012, nada más que lo anunciado.