| Reportaje | Sigue la huelga |
Magia en el rastro: nada por aquí, nada por allá
Los ambulantes mantienen su postura y León se queda sin mercadillo por segundo domingo
Aspecto que presentaba ayer la explanada de Clarés a mediodía, después de que los vendendores ambula
león
A media mañana del domingo, Eras de Renueva descansa en paz. No es que necesite un epitafio, es que reina la calma absoluta.
En el antiguo desguace de Clarés, no. Aparte del trasiego de coches y amantes nocturnos que pudiera haber en la noche de la víspera, los albores del mediodía convierten la zona en el lugar predilecto para el paseo de muchos curiosos, que acuden a ver si al final los vendedores ambulantes cumplen con su amenaza o no.
«Si se le ocurre a alguno venir a plantar el chiringuito, aparte de una somanta de palos, le cae un destierro como hay Dios», reconoce uno de los vendedores, que oculta su ataque de sinceridad detrás del anonimato.
Emilio Borja no tiene problemas para facilitar su identidad: «De hecho yo fui el primero que inventó el rastro, hace 30 años en la Plaza Mayor. Nunca vamos a tener un sitio igual en la vida. Era el mejor. Ahora hay que buscar una solución. En Astorga estuvimos dos domingos sin poner los puestos, pero al final hubo un acuerdo».
Por segundo domingo consecutivo, los puestos del mercadillo están de huelga. «Esto es insalubre y además, en invierno es para morirse de frío y en verano para asarse de calor».
Hay manifestación anunciada para el día 25 de mayo a las 18.00 horas. Hoy el colectivo solicitará cita al alcalde para negociar el tema. Suma y sigue.