El plan piloto cuenta con la adhesión del 35% de los municipios con menos de 20.000 vecinos
La Diputación controlará la calidad del agua de 72.500 habitantes del área rural
Contratará los servicios de laboratorios para analizar el suministro y evitar riesgos
redacción
El 35% de los munipios menores de 20.000 habitantes han decidido adherirse al servicio de control de calidad de las aguas de consumo humano auspiciado por la Diputación, con el objetivo de garantizar que el sumistro llegue en perfectas condiciones a la población, tras la alarma suscitada por la aparición de los casos de arsénico y ante la falta de inspección periódica de muchos de los pueblos por falta de medios.
Son un total de 74 municipios, que engloban a 502 núcleos (el 37% de los 1.347 que integran la provincia sin contar León, Ponferrada y San Andrés), y una población cercana a los 72.500 habitantes, el 30% de los que residen en el área rural.
Una vez que estos ayuntamientos aprobaron en sus plenos la encomienda de gestión de esta labor a la institución provincial y firmaron el convenio, ahora la Diputación publicará las bases del pliego de condiciones para que los laboratorios interesados concurran.
La cuantía del contrato, 835.000 euros por dos años de servicio, obliga a su publicación en primer lugar en el Boletín de las Comunidades Europeas. El concurso se ha dividido en seis lotes, coincidiendo con los partidos judiciales de Ponferrada, Astorga, La Bañeza, León Norte, León Sur y Sahagún-Cistierna.
Las empresas contratadas tendrán como misión la toma de muestras, las analíticas y la elaboración de los informes sobre el estado de las aguas del abastecimiento de cada núcleo incluido en el programa. Por lo que se refiere a los costes, serán asumidos por los ayuntamientos y juntas vecinales beneficiadas, mientras que la Diputación se hará cargo de los gastos de los desplazamientos para la toma de muestras.
Una vez resuelto el concurso, los laboratorios adjudicatarios deberán presentar en el plazo de un mes el plan específico de análisis y control para cada municipio. Además, los resultados tendrán que ser entregados a los ayuntamientos y a la Diputación. Han de incluir todos los detalles del análisis, así como los incumplimientos que se detecten y las medidas correctoras y preventivas propuestas.
También un informe explicativo de los resultados y la calificación: «apta para el consumo», «no apta para el consumo» o «no apta para el consumo y con riesgos para la salud», lo que requerirá acciones inmediatas.