La reurbanización de Fernández Ladreda hará peatonal el tramo entre Murillo y Miguel Castaño
a. c. | león
La «transformación de lo que es una carretera en un bulevar»: la reurbanización de Fernández Ladreda, estará «antes de final de año terminada», como emplazó ayer, durante su visita a las primeras labores del proyecto, el alcalde de León, Francisco Fernández, que estuvo acompañado por los concejales de Urbanismo, Movilidad y Participación Ciudadana, Francisco Gutiérrez, José Antonio Díez y Vicente Canuria, respectivamente.
Fernández explicó que la obra, que cuenta con un presupuesto de más de 3 millones de euros, permitirá «mejorar la calidad de vida de los ciudadanos», gracias a la reorganización de todo el espacio: los dos carriles pegados a la mediana -”uno en cada sentido-” quedarán reservados para el bus en un primer término y con posterioridad para el tranvía; se habilitará un carril bici; se eliminarán todos los semáforos desde la plaza de toros -”previa construcción de una glorieta en el entorno del coso taurino y la reforma de que hay en el cruce con José Aguado-”; se renovará el pavimento; se aumentarán las aceras y los espacios públicos; y se convertirá en peatonal el tramo comprendido entre la calle Murillo y la avenida Alcalde Miguel Castaño. Esta modificación hará que «los largos recorridos vayan desviados por la ronda y que sólo el tráfico propio de la ciudad pase por Fernández Ladreda», como detalló el concejal de Urbanismo.
La obra, que «los vecinos llevaban muchos años reivindicando», se encuadra dentro de las inversiones del Plan E del Gobierno central y ayudará al asentamiento de «75 puestos de trabajo», ensalzó el alcalde.