En busca de identidades

Mientras en Zamora se empezaba a abrir la segunda fosa de paseados en la Guerra Civil bajo autorización judicial -”la primera fue el pozo Grajero de León en 1998-” en León se presentaba ayer la campaña del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) para la ampliación de la recogida masiva de muestras de sangre y testimonios entre familiares de víctimas de desapariciones forzadas durante el período de 1973 a 1984 en el país austral.

Dos procesos paralelos que afectan a las secuelas de dos dictaduras, pero diferentes. Luis Fondebrider, presidente del EAAF, y Mercedes Salado, antropóloga, expusieron los trabajos llevados a cabo desde que se fundó la asociación en 1984 y que hasta ahora han permitido recuperar cerca de un millar de esqueletos de personas asesinadas después de pasar por centros de detención ilegal.

Hasta ahora se ha logrado identificar a unas 350 personas. La campaña masiva de recogida de sangre entre familiares realizada por el EAAF, con el apoyo del Ministerio de Salud y Derechos Humanos de Argentina, ha logrado recoger cinco mil muestras de unas 2.500 familias. Los primeros resultados han identificado a 42 personas entre los 600 esqueletos que aún quedan por identificar.

Las personas interesadas en entregar su muestra de sangre tienen que ponerse en contacto con el teléfono 608 972 984 o pedir cita a través del correo electrónico: derechoshumanos@portalargentino.net.