Feve solucionará en un año los ocho pasos peligrosos de Villaquilambre
La compañía garantiza que el municipio tendrá una línea totalmente segura tras el verano del 2010 e inicia la clausura de los primeros tres cruces con 325.000 euros
El alcalde, junto al concejal de Deportes y el director de comunicación de Feve
El director de comunicación de Feve, Jorge Antonio Sebastián, anunció ayer en León que dentro de un año «no habrá ningún paso sin automatizar en el municipio de Villaquilambre». Prueba de ello es que la compañía ya ha iniciado la supresión de los tres primeros cruces peligrosos de esa línea, ubicados entre el apeadero de Villaquilambre pueblo y Villasinta, con una inversión de 325.000 euros, según indicó.
La solución para ese tramo pasa por clausurar los pasos de Los Linares, La Mansiella y La Rampla y derivar ese tráfico rodado, a través de una nueva carretera interior junto a las vías, hacia un cuarto cruce junto al apeadero de Villasinta que, en este caso, se superará con un subterráneo.
El Ayuntamiento de Villaquilambre ha llegado a un acuerdo con los cuatro propietarios de los terrenos a los que afecta la construcción de la carretera para «que los cedan desinteresadamente».
Sebastián reconoció que tras esa obra se abordará la eliminación de los otro cuatro pasos conflictivos del municipio, además de construir un nuevo apeadero en Navatejera, valorado en 120.000 euros.
El director de comunicación de Feve quiso dejar claro que «los problemas de viabilidad de la línea de Villaquilambre estarán solucionados tras el verano del 2010». Y destacó que todos los trabajos se han consesuado con el Ayuntamiento para elegir la opción «más eficaz y barata».
Ventajas. También confirmó que no se realizarán pasos elevados para salvar las vías, una posibilidad que disgustaba a los vecinos. Respecto al futuro, Sebastián no descarta que los trenes de Feve puedan funcionar como tranvías, una vez se eliminen los pasos con barrera que, actualmente, complican cruzar por las vías. Cuando los seis kilómetros sean seguros, en poco más de un año, los trenes podrán aumentar su velocidad y ofrecer mayores servicios.
El equipo de Gobierno ya ha manifestado que considera «una ventaja» disponer de un medio de transporte de viajeros como los trenes de Feve, que en siete minutos llegan a León. Por eso, quieren aprovechar y potenciar la capacidad de penetración de los trenes en la ciudad como transporte urbano.
Con el plan que desarrollará Feve para garantizar la seguridad de la línea, el alcalde, Lázaro García Bayón, entiende que se supera la barrera que, tradicionalmente, ha supuesto el ferrocarril en el municipio. No obstante, en el Plan General de Ordenación Urbana que se aprobará este año, se dejan abiertas otras soluciones de futuro para minimizar el impacto del tren.
El concejal de Urbanismo, Jesús García, explica que el documento recoge varios corredores tanto para el posible soterramiento total de la línea como para la conversión del tren en un tranvía que integre el ferrocarril de vía estrecha en la ciudad de León y su área metropolitana, en la que se incluye Villaquilambre. A diario, 44 trenes circulan por los seis kilómetros de Villaquilambre.