Un polígono castrado por la N-120
Análisis | M. RABANILLO
Los responsables de Coreal destacaron ayer dos razones muy concretas para instalarse en Villadangos: la ubicación y condiciones del polígono y las «excelentes comunicaciones» que ofrecía para facilitar la accesibilidad a determinados mercados. Con 25 empresas a pleno rendimiento y otras 60 en espera de licencias, el polígono de Villadangos aspira a convertirse en el germen del impulso industrial de la provincia. Grandes empresas como Mercadona, que ya está ultimando la construcción de su centro logístico, Vestas, fabricante de componentes eólicos, la compañía danesa Bach, que llega al recinto atraída por Vestas para fabricar carcasas para aerogeneradores, y ahora, Coreal, el tráfico de camiones convertirá la N-120 en un caos si no se acomete pronto al acceso previsto por la Junta, que ya se está adjudicado, para evitar un stop en plena carretera general, como señaló ayer uno de los responsables de la empresa. Pero la reivindicación va mucho más allá. Además del acceso directo a la autopista León-Astorga, desde las empresas y el propio Ayuntamiento se incide en la necesidad de que al menos el tramo de la vía entre Villadangos y León sea gratuito, una cuestión que, como bien señaló ayer la presidenta Isabel Carrasco, corresponde al Gobierno central y que, según el alcalde de Villadangos, ha recibido hace escasas fechas su enésima negativa por parte de la Dirección General de Carreteras.
La urgencia de agilizar los trabajos en el caso del acceso es evidente después de los tres accidentes mortales ocurridos en las dos últimas semanas en ese tramo. También lo es que la administración central tome conciencia de que es vital la supresión al menos parcial del peaje para atraer empresas a León y aprovechar la privilegiada situación geográfica de la provincia como eje del noroeste.