Un blanco fácil

A mediados de semana, el PAL-UL denunció que empleados de la brigada de obras realizaban trabajos en un chalé privado, algo de lo que pediría cuentas en el Pleno y así lo hizo ayer. No contento con la explicación dada por la alcaldesa fue el concejal de Urbanismo, Manuel Rubial, quien con la misma fotografía objeto de la denuncia y con los informes técnicos en la mano explicó cómo, cuando, dónde y porqué los empleados municipales estaban derribando un muro existente en la acera en el que se ubicaban las cajas de la luz y el gas de dicho domicilio y cuyo traslado harían después los técnicos de las compañías correspondientes. Sin embargo, la incredulidad y desconfianza total del edil del PAL-UL, que no creyó ni una sola palabra del edil de Urbanismo, motivó un cabreo considerable de Manuel Rubial que pidió «sosiego, respeto y tranquilidad», al tiempo que se preguntó porqué es su persona el blanco de las críticas, denuncias, sospechas y amenazas judiciales del concejal del PAL-UL. Además, Rubial pidió a Gómez que «deje de dañar» la imagen del equipo de gobierno «sin motivo alguno».

Pero el enfrentamiento entre ambos concejales venía de atrás y es que en el punto que aprobaba la apertura de una calle en la Urbanización Los Pelícanos volvió la burra al trigo. El concejal del PAL-UL increpó al edil de Urbanismo con afirmaciones como «no se entera», «actúa con negligencia», «no escucha por lo que no puede aprender» o «así le va la vida política». Una vida que de momento a Rubial no le va tan mal ya que lleva diez años de concejal en San Andrés, tiempo durante el que ha asumida concejalías tan importantes como Hacienda o Urbanismo. Y es que al César hay que darle lo que es del César. Mientras, el PAL-UL lleva dos años con representación en la oposición de este Ayuntamiento y tiene un concejal. Y fue en estas cosas en las que los señores concejales pasaron las dos horas y media que duró un Pleno que debía de haber sido de mero trámite. En San Andrés se saca punto a todo, incluso al acta de la sesión anterior, punto primero del orden del día, que ayer quedó sobre la mesa porque, al parecer, no recogía lo que habían dicho algunos ediles de la oposición, con el consiguiente «mosqueo» del secretario ya experto en estas lides. Finalmente, y a propuesta de UPL, hubo repaso a temas tan «manidos» como el soterramiento del tren, el cementerio o los bomberos. En definitiva, más de lo mismo.