Piden un año de cárcel para el primer detenido por el crimen de Villaobispo

El Juzgado de lo Penal número 1 de los de León pasará vista oral el próximo día 8 de septiembre, a partir de las 12.30 horas a la acusación que pesa sobre un individuo al que se imputa un presunto delito de tenencia ilícita de armas. El procesado fue detenido y encarcelado el pasado mes de noviembre en relación con el crimen de Villaobispo. Dos clanes de una misma familia extremeña se enfrentaron a tiros en la localidad de Villaobispo en la mañana del día de autos. A raíz de lo sucedido, uno de sus integrantes perdió la vida en el tiroteo y cuatro fueron detenidas en el proceso de la investigación, que se extendió varios meses y resultó especialmente compleja por la peligrosidad de los sospechosos y por la complejidad de lo sucedido. Los dos grupos estaba enfrentados supuestamente por asuntos relacionados con la venta de drogas y ya habían protagonizado algunos episodios violentos en la provincia de Cáceres. Tras escapar de una primera encerrona, donde una persona resultó herida en un tiroteo, tres miembros de un primer grupo se refugiaron en Villaobispo, donde trataban de llevar una vida discreta. Sin embargo, el segundo grupo (miembros de otro sector de la misma familia) consiguió localizar a las víctimas y en la mañana del sábado 8 de noviembre se produjo el cruce de disparos, que acabó con un muerto. De acuerdo al escrito de calificaciones provisionales, el imputado en este juicio (en el que solamente se contempla una supuesta tenencia ilícita de armas) participó en el tiroteo con una escopeta de marca Maverick BY Mossley que contenía seis cartuchos de caza en la recámara, en perfecto estado de funcionamiento. El procesado no disponía de licencia de armas ni de guía de pertenencia, por lo que el Ministerio Público exige una pena de un año de prisión. La defensa presenta documentos según los cuales estaría probado por el Instituto Nacional de Toxicología que su cliente es consumidor de Cocaína, Heroína y Metadona y que el día en el que se le detuvo, solicitó ver al forense, que apreció una crisis de ansiedad. Desde que en enero del 2005 muriera su hijo, siempre según el letrado defensor, ha consumido cantidades exageradas de droga «que le han llevado a las alucinaciones y a ver bichos que le comían», con riesgo de suicidio. La defensa considera que no hay delito y por tanto solicita la libre absolución. Si lo hubiera, se apela ala eximente completa del artículo 20.2 del Código Penal y a la incompleta del 21.1, con lo que procedería su libre absolución, según el escrito de defensa.