Villaquilambre usará su red de presas para recoger las pluviales de los pisos
El plan director de saneamiento apuesta por separar el agua de lluvia de las fecales con redes separativas en las viviendas y nuevos emisarios en el municipio
Villaquilambre ha decidido aprovechar el potencial de las presas que recorren su territorio para aprovechar las aguas pluviales que caen en las tuberías de las viviendas. El plan director de saneamiento separa las aguas pluviales de las fecales a través de dos redes diferenciadas. El proyecto especifica que el agua de lluvia se encauzará directamente a las presas del municipio y de éstas al río gracias a una serie de emisarios de un metro de diámetro que ya han comenzado a construirse.
La idea es que el agua limpia no se mezcle con la sucia en las mismas tuberías para evitar el colapso de los colectores en épocas de lluvias y para reducir el gasto depurativo. Las obras beneficiarán a la denominada fachada Este, de Villaobispo de las Regueras a Robledo, donde se pretenden implantar tres emisarios para recoger las aguas pluviales de casi 380 hectáreas. El tramo que se ha iniciado, de unos 700 metros, discurre por debajo del Camino a León, en la frontera entre Villaobispo y Villamoros. Está presupuestado en 160.000 euros que cofinancian la Diputación y el Ayuntamiento. En esa zona se recogen más de 1.100 litros por segundo, según las estadísticas.
El concejal de Infraestructuras, Vicente Álvarez, reconoce que los emisarios del Camino del Ramal, en Villarrodrigo, y en la franja de Villarrodrigo a Robledo, se acometerán en fases, según la disponibilidad económica. A ellos se unirán los trabajos en la fachada Oeste del municipio, que afecta a Villaquilambre pueblo y Navatejera, y que se han integrado en el Plan General de Ordenación Urbana. De momento, las urbanizaciones de nueva construcción ya están aplicando el plan para separar las aguas pluviales de las fecales. Para no duplicar gastos, el Ayuntamiento ha mandado construir varios pasos por debajo de la León- Collanzo.