El PSOE quiere pactar el presupuesto con Carrasco para salvar a los pueblos
Reclama diálogo a la presidenta de la Diputación ante los recortes de obras y servicios previstos en las cuentas del 2010 y la asfixia de los ayuntamientos
Matías Llorente y Demetrio Alfonso Canedo, ayer en la rueda de prensa en la Diputación.
Los socialistas pretenden consensuar los presupuestos del 2010 en la Diputación ante la situación de crisis económica actual y la previsión de importantes recortes en obras y servicios, anunciados ya por la propia presidenta de la institución provincial por la merma de la aportación del Estado para el año que viene calculada en 14 millones de euros. Así, el portavoz del PSOE, Demetrio Alfonso Canedo, pidió ayer al equipo de gobierno diálogo para sacar adelante las nuevas cuentas y garantizar entre todos que las necesidades de los municipios estén cubiertas.
«Si la asistencia y la cooperación a los ayuntamientos de menos de menos de 20.000 habitantes no se garantiza, se debe cuestionar entonces la existencia de la propia Diputación y, desde luego, la forma de gobernar de la presidenta no es la verdadera esencia de la Diputación», dijo. Exigió, en este sentido, que todas las inversiones en los pueblos y los servicios sociales que presta la institución estén garantizados. Ofreció, igualmente, la colaboración del PSOE en la reducción «drástica de los gastos». De todas formas, recordó que «en estos momentos de crisis se requiere inversión y empleo en el área rural, aunque también las arcas provinciales tienen margen para recortar gastos».
Demetrio Alfonso Canedo reclamó a la presidenta que realice un llamamiento «serio y urgente» a la Junta. Denunció que la Diputación no puede «soportar» las competencias impropias, centradas en la gestión de los centros asistenciales, y que cada año suponen a las arcas provinciales cerca 20 milllones de euros. «El PP siempre se parapeta en el Pacto Local firmado, con vigencia hasta el 2011 para justificarse». Recalcó que sería «justo que la Junta tenga este gesto con la Diputación y la provincia».
El PSOE criticó ayer, igualmente, el hecho de que Isabel Carrasco haya culpado al Estado «de robar a la institución provincial por los 14 millones menos que recibirá; no corresponde a una presidenta de la Diputración una calificación de tal magnitud». Ante esta acusación de la responsable del Palacio de los Guzmanes respondió: «Sabe que existe una crisis económica y que todos están afectados y como es lógico el dinero que llega a ayuntamientos y diputaciones será menos; así que no se roba absolutamente nada».
Aseguró que la presidenta anuncia «recortes salvajes en los pueblos y en la prestación de servicios y nosotros esperábamos otra cosa, como más control del gasto corriente y rebajas en publicaciones sin sentido en estos momentos y autopublicidad». Tres son las líneas que reinvindicará el PSOE: esfuerzo en mantener las inversiones, garantizar los servicios sociales y reducción de gastos.
Por su parte, el viceportavoz socialista, Matías Llorente, presentó ayer ante el Procurador del Común una queja «por la discriminación a los ayuntamientos socialistas en el reparto de los distinos planes de la Diputación». Enfatizó que Carrasco utiliza el reparto «para potenciarse en su partido».
También puso de relieve que hasta ahora la venta de patrimonio provincial había salvado los distintos presupuesto. «Ahora están a ver si desbloquan La Granja porque ya no queda nada que enajenar». Quiso dejar claro, además, que los ayuntamientos «deben ser prioritarios» en la gestión.