CiU se escuda en «la maldad» de los socialistas
El PSOE cambió ayer el sentido de su voto en el Congreso sobre la derogación del registro de preasignación de las energías renovables con el argumento de fortalecer este emergente sector energético. CiU, que había promovido el cambio normativo, se escudó en «la maldad» de los socialistas, que según su argumento cambiaron la intención de su propuesta y formularon una reforma que «podía haber resultado letal para las energías renovables».
El portavoz económico de CiU, Josep Sánchez Llibre, señaló ayer que su formación tardó «24 horas en darse cuenta de que la adenda socialista eliminaba de facto la financiación de los parques eólicos y termosolares hasta que se definieran las nuevas primas».
En cualquier caso, fue el único responsable político en pedir disculpas públicamente al sector por «la ansiedad e incertidumbre provocada por el equívoco». Sánchez Llibre señaló también que el incidente debe «servir de lección para tramitar en el futuro cualquier reforma legislativa que afecte al sector energético», y concluyó que el Congreso «está para corregir lo mal que lo ha hecho el Senado», en referencia a la votación anterior.