Las familias se unen para pedir la uvi

«A mi hija ya la he perdido, pero no quiero que esto le vuelva a pasar a otros padres. Es una vergúenza que en el Hospital no haya una sala de uvi para los bebés», argumenta el padre de la niña fallecida el lunes.

La familia se ha unido a la reivindicación que plantearon al consejero de Sanidad de la Junta, Francisco Javier Álvarez Guisasola los padres del niño de tres años que murió por meningitis el pasado mes de febrero, sobre la necesidad inminente de poner en marcha en el Hospital de León la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) pediátricos con el fin de prestar la mejor atención sanitaria posible a los pequeños que llegan al Hospital con graves problemas. Se da la triste causalidad que la niña fallecida ayer era familia de los padres que perdieron a su hijo de tres años a causa de meningitis. Esto ha servido para que ambas familias se dirijan al consejero de Sanidad para exigirle que se agilice al máximo las obras de la UCI y la unidad pueda entrar en funcionamiento lo antes posible. Así lo harán mediante una carta que harán llegar al responsable autonómico de Sanidad ya que, según recuerda el padre del niño fallecido, Iñaki Pérez, «así me lo prometió el consejero» en la reunión que mantuvo con él el pasado mes de febrero. De hecho, Guisasola se comprometió a que entraría en funcionamiento «tras el verano».

Servicio imprescindible. Ambas familias coinciden en señalar que es imprescindible que León cuente con este servicio para evitar en la medida de lo posible que otras familias sufran esta tragedia. «Lo más importante es que León cuente con este servicio que pueda servir para atender, curar y tratar a muchos niños», indicó Iñaki Pérez.

El gerente del Hospital de León, Juan Luis Burón, desvinculó la muerte de la niña a la carencia del servicio de una uvi pediátrica, cuyas obras estarán terminadas en los próximos días.