Diario de León

Trevín: «Los proyectos eólicos dependen de la Sama-Velilla»

El delegado del Gobierno en Asturias defiende que la línea es «cuestión de Estado», no una guerra asturleonesa

Publicado por
L. Urdiales | redacción
León

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A ntonio Trevín aguanta el tipo cuando en León se le pregunta por la Sama Velilla. ¿Caso de conflicto territorial entre asturianos y leoneses? «No. Asunto de interés nacional», confronta el delegado del Gobierno en Asturias, que desde hace unos meses se ha convertido en el icono mediático del flanco político que está de acuerdo con que la línea de alta tensión que ha de cruzar los valles del norte de la provincia leonesa (80 kilómetros hasta llegar a la palentina Velilla del Río Carrión) salga adelante según el proyecto de Red Eléctrica. «Me gustaría precisar que desde el punto de vista del Gobierno de España, la Sama Velilla no es dos puntos de vista sobre un asunto; es en realidad un asunto de política energética de España», analiza el político asturiano, que no rehusa el contenido de un debate que a este lado del Pajares levanta salpullidos, incluso, entre cargos electos y orgánicos de idénticas siglas políticas.

La Sama Velilla divide las opciones políticas, pero no a los representantes del Gobierno, que cierran filas en torno a la norma mayor de interés nacional que preside el proyecto. «Hay proyectos de producción de energía eléctrica en Galicia y el varias zonas de León que necesitan y dependen de una línea de evacuación porque sin esa estructura no se puede producir; energía de generación eólica. Hablamos de proyectos energéticos que no se limitan en absoluto a Asturias», matizó Trevín, que acotó en dos cuestiones básicas que atienden a la responsabilidad del Gobierno: «Una línea de evacuación que permita producir y dar soporte a las energía limpias que se proyectan y ya se generan en el norte e España; y segundo, que Asturias no es una isla energética en España ni en su condición de periferia». Por ese interés de Estado que exhiben los defensores de la línea, Trevín propone reflexión, diálogo y conciliación de intereses.

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