La LOE incentivará la prejubilación de más de 650 profesores hasta el 2011
Uno de cada cinco docentes de Castilla y León que opta por dejar de dar clase de forma prematura desarrolla su actividad profesional en centros leoneses de enseñanza
Son muy pocos los profesores que optan por dar clase hasta los 65 años.
La implantación de la Ley Orgánica de Educación incentivará en León la jubilación voluntaria y anticipada de unos 650 profesores de sesenta años que acrediten al Estado al menos quince cursos de servicio docente.
El ministerio da de plazo hasta el 2011 para que los profesionales de la enseñanza puedan acogerse a este sistema de bajas estimuladas que regula la disposición segunda de la LOE para garantizar el relevo generacional de las plantillas y dar cobertura a las reivindicaciones del profesorado, que rechaza, en su mayor parte, el modelo ordinario de jubilación.
En las tres primeras convocatorias -”desde el 2007-” , la Junta ha aprobado el cese de la actividad docente a 434 profesores leoneses, la cifra más alta de las registradas en la comunidad. Uno de cada cinco profesionales de la enseñanza que deja libremente su ocupación imparte clase en la provincia.
En el requerimiento de este año han registrado su prejubilación 137 profesores -”100 maestros y 37 de secundaria-” de un total de 724 docentes. Las cifras del 2007 y 2008 son muy similares. En el primer año de asentamiento de la LOE optaron por este sistema 150 profesionales de la enseñanza, mientras que en el 2008 registraron la baja 147. Según las estimaciones sindicales, en las dos próximas convocatorias, que serán las últimas si la administración no prorroga el precepto provisional, la cifra será parecida, hasta cerrar la jubilación anticipada de unos 650 profesores que dan clase en alguno de los centros escolares de la provincia. En el 2007, León contaba con 794 docentes con edades comprendidas entre los 56 y los 60 años. Practicamente todos dejaran el aula antes de tiempo.
Diferencias. Un dato significativo que deja una media anual de bajas incentivadas de unos 130 docentes, frente a los 30 que optan por llegar hasta los 65 años para dar por zanjada su vida laboral.
El crecimiento exponencial de las prejubilaciones comenzó ya con la Logse, la primera ley educativa que incitaba al cese de la actividad sin tener cumplidos los 65 años. El acuerdo del 14 de mayo del 2000 vinculó a la administración autonómica a aportar el 150% de lo que destinaba el Gobierno central a las gratificaciones extraordinarias. Los maestros que optan por este sistema reciben la misma pensión que si continúan trabajando hasta cumplir los 65. Hace 10 años sólo 261 profesores de la comunidad eligieron dejar de dar clase de forma prematura, frente a los 610 del 2007, año en el que la LOE puso fecha de caducidad a esta iniciativa: el 2011. Aunque existe el compromiso de revisar tanto el sistema como los requisitos para acceder a ella.