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quintana del marco

El alcalde reclama medidas contra el expolio en la villa de Los Villares

El regidor demanda a la Junta ayudas para vallar una finca del complejo romano y para asumir el control arqueológico impuesto por la comisión de Patrimonio

Una fotografía tomada en la zona de Los Villares hace pocos días.

Publicado por
maite almanza | la bañeza
León

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El alcalde de Quintana del Marco, Pedro Vidal, reclamó ayer a la Junta de Castilla y León colaboración para el vallado de una finca que se encuentra dentro de la delimitación de la Zona Arqueológica de la villa romana de Los Villares, así como para asumir el control arqueológico de la zona impuesto por la comisión de Patrimonio con motivo de dicho vallado.

El regidor indicó que había solicitado a Patrimonio permiso para cercar el solar «para evitar expolios» que «la finca viene sufriendo de toda la vida», así como para tapar un pozo que se encuentra en el medio del terreno, con el fin de prevenir caídas. La comisión autorizó el vallado pero impuso la obligatoriedad de realizar, además de un seguimiento arqueológico de los trabajos, un control previo en aquellos puntos que vayan a ser sometidos a excavación para conocer si los restos podrían verse afectados. «El Ayuntamiento no tiene presupuesto suficiente, así que no ejecutará ninguna de estas acciones si no hay ayuda de la Junta. La finca quedará en el olvido, como está, lamentablemente», señaló el alcalde, que recordó que la villa romana está declarada Bien de Interés Cultural (BIC). También precisó que los restos arqueológicos que conserva esta parcela son vestigios de construcciones y de pavimentos romanos.

Vidal consideró que el solar «se encuentra en situación de abandono» y señaló que así se lo comunica a algunos visitantes que llegan hasta el lugar atraídos por la información que sobre él difunden algunas administraciones.

«La finca está llena de matorral y de maleza», señaló el alcalde que indicó que, si bien no toda la vegetación se secará en verano, dado que el solar está en zona de regadío, «la hierba sí se secará», con el consiguiente peligro de incendio, dijo. El alcalde también demandó la ubicación en la carretera cercana de un cartel anunciador de la villa.