Entrevista | Chema Gómez Pontón | Escritor
«La derrota es mucho más humana que la victoria»
La Casa de Cultura de Villablino acoge hoy por la tarde la presentación de este compendio de historias sobre el paisanaje
Chema Gómez Pontón presenta hoy su obra en Villablino.
La nueva obra de Chema Gómez Pontón ofrece al lector relatos plenos de humanidad y en los que demuestra su muy perspicaz e imaginativa mirada sobre el paisanaje que lo rodea. Hoy lo presenta en la Casa de Cultura de Villablino, a las 20.00 horas.
-¿Cuál es el germen de este libro? ¿Son cuentos escritos a lo largo de mucho tiempo?
-Ha sido el trabajo de varios años y de diversas etapas literarias. Hay cuentos que tienen un lustro y otros fueron escritos en el último año. La matriz fundamental ha sido la necesidad de expresar sentimientos eligiendo el relato para prescindir de lo superfluo.
-¿Existe algún tipo de hilo conductor entre todos ellos?
-Todos están unidos por el carácter de sus protagonistas, seres desheredados, ápatridas, bohemios, soñadores-¦ ante todo, perdedores. En cuanto a los 13 relatos, nueve de ellos están ambientados en el Bierzo y Laciana y el resto adquieren relevancia universal. Una de las novelas, Menchevique Calavera , esta recreada en Laciana, y la otra, La Liga de la Intelectualidad , en Ponferrada.
-Los variopintos personajes que aparecen en este nuevo libro, ¿están basados en personas o acontecimientos reales?
-No, en ellos se mezcla realidad y ficción. Al ser cuentos y relatos, en ocasiones se prescinde de la realidad, el género ayuda a ello y existen dos características legadas por el mito clásico como son el animismo y la arbitrariedad.
-¿Por qué nos atraen tanto los antihéroes?
-Son personalidades muy atractivas y la mar de sugerentes debido a sus experiencias vitales. Sin ellos no se podría concebir ni el cine ni la litaratura. La derrota es mucho más humana y la mayoría de las personas hemos perdido muchas más batallas que ganado otras, de ahí la afinidad. Por regla general, los mal llamados perdedores, pues para mí no lo son, siempre enseñan mucho más que los ganadores, al menos a nivel moral. Más que perdedores son desheredados de la sociedad. La realidad les ha ocasionado un incumplimiento de expectativas y son protagonistas de sueños rotos.