La potabilizadora precisa una mejora tecnológica y aumentar mano de obra
Una auditoría que la Etap, inaugurada en el 2008, no incluyó los últimos adelantos
Depósitos de la estación de tratamiento de agua potable de La Bañeza.
El Ayuntamiento de La Bañeza hizo público ayer el contenido de la auditoría externa de la estación de tratamiento de agua potable de La Bañeza (Etap), solicitada a consecuencia de la aparición de excesiva materia en suspensión en el agua de la red de abastecimiento como consecuencia de la crecida del Órbigo a principios de este año. Del informe, redactado por un ingeniero, se deriva la necesidad de automatizar los procesos de la Etap y de que la concesionario contrate un empleado más, con el fin de mejorar la atención a la planta potabilizadora. La Etap se inauguró oficialmente en agosto del 2008, con una inversión de 1,97 millones de euros.
Según explicó ayer el alcalde de La Bañeza, José Miguel Palazuelo, entre las carencias de la instalación se encuentra la «falta de un sistema automático de detección de la calidad del agua» y se destaca «la incorrecta granulometría de los filtros» -”el tamaño de las partículas que los forman-”, aspecto que ya ha quedado resuelto tras advertirlo la adjudicataria de la gestión del agua en la ciudad Aqualia. El regidor añadió que existe «falta de vigilancia de la planta», lo que motiva que el mantenimiento de la instalación no sea el óptimo. Palazuelo subrayó que el auditor destaca la buena calidad del agua durante la mayor parte del año y ciñe el problema a la crecida del río y considera suficiente la cualificación técnica de los empleados de Aqualia, si bien señala la necesidad de ampliar la plantilla en un puesto más».
En lo que se refiere a la instalación, según informó Palazuelo, el redactor entiende que su ampliación «no incorporó la última tecnología» aplicable al tratamiento de aguas, lo que condujo a que los filtros fallasen en la última riada. «La instalación anterior era mucho peor a la que tenemos en la actualidad y ahora hay que pedirle a Aqualia que resuelva las deficiencias para que no sea el usuario el que pague las consecuencias», manifestó el alcalde.
El informe «propone la automatización de la Etap para mejorar o, en su caso, revisar los equipos que existen, así como instalar un control telemático» de su funcionamiento. Además del cambio de la arena de los filtros, estima conveniente que éstos dispongan de un sistema para su lavado y secado, así como «instalar sensores y retroválvulas para conocer los problemas que se puedan plantear». También es partidario el auditor de cubrir el depósito de agua ante la cercanía de chopos, que, durante la primavera desprenden polen en forma de pelusa «que complica el proceso», facilitar las labores de mantenimiento y revisar la instalación eléctrica.
«Existe una responsabilidad de una mala ejecución de la obra y falta de supervisión por parte de la dirección técnica de ésta, que encargó la Junta», incluye el informe, según Palazuelo.
Por el momento, además de sustituirse la arena de los filtros, se ha mantenido una reunión con la adjudicataria, «en la que se habló de ampliar la plantilla a una persona más».
La financiación. Con las conclusiones de la auditoría, el Ayuntamiento de La Bañeza pedirá a Aqualia «un presupuesto de las mejoras necesarias para la estación potabilizadora», así como de aquellos aspectos que no parezcan en el informe y estime conveniente acometer, con el fin de remitir una propuesta de mejora a la Consejería de Medio Ambiente y «acometer una reforma inmediata» de la Etap, «buscando fórmulas de entendimiento» para la financiación de las obras.