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ALIJA DEL INFANTADO

El Ayuntamiento desoye al TSJ y el juez de paz recurre a la Guardia Civil

La antigua oficina judicial carece de mesa y no se ha acondicionado aún otra nueva

Un agente de la Guardia Civil conversa con Victoriano Villar en la entrada al Ayuntamiento.

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A. Domingo | Alija del Infantado
León

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El Juzgado de Paz de Alija del Infantado volvió a celebrar sesiones después de que éstas se suspendieran el 19 de enero. En concreto, se atendieron varios exortos de diferentes juzgados, si bien utilizando las oficinas generales del Ayuntamiento de Alija como lugar para ver los expedientes, ante la falta de una mesa en la oficina que ocupaba la oficina judicial en la casa consistorial, hasta que el alcalde decidió su traslado a otro inmueble.

El juez de paz, Victoriano Villar, requirió la presencia de la Guardia Civil para dar fe de la situación del local, «doce días después de que se les notificara el acuerdo de la Sala de Gobierno del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJ) por el que se instaba al alcalde a que el juzgado regresara al Ayuntamiento mientras se preparaba una sede en condiciones si es que esta circunstancia se daba», explicó ayer Villar, que anunció que el lunes denunciará la falta de sede pese al acuerdo que tomó el TSJ.

Finalizadas las causas previstas para el día, a las 12.35 horas llegaba al Ayuntamiento una patrulla de la Guardia Civil del puesto de Alija, que mantuvo una reunión con el juez de paz, los secretarios del juzgado. En eses momento no se encontraba ningún miembro del equipo de gobierno en el edificio, aunque, minutos más tarde, llegó el alcalde, Luis Panero, que se dirigió directamente a su despacho. Panero, que conversó en dos ocasiones con los agentes, mandó redactar un escrito de citación dirigido al juez de paz, para que asista el lunes a las 10.00 horas al traslado de la documentación del juzgado y del registro civil a la nueva sede: un edificio que se construyó junto a la residencia de mayores, pensado para albergar el consultorio médico de la villa.

El mutismo del alcalde. Una vez que los agentes abandonaron las dependencias municipales, el alcalde declinó realizar manifestación alguna sobre el asunto. Villar explicó ayer que la Guardia Civil acudió al consistorio a petición suya y añadió que el TSJ se ha interesado por este asunto hoy mismo».