Defensa se llevará el polvorín con sus 73 militares a Valladolid antes de junio

El polvorín de Cuadros será trasladado a Valladolid antes de que finalice este semestre. La condena definitiva para el acuartelamiento ubicado en la localidad de La Seca llegó ayer de boca de la directora general de Infraestructuras del Ministerio de Defensa, Mónica Melle, en el transcurso de una visita a León para inaugurar varias carreteras en el área del Teleno. Melle justificó el desmantelamiento en «la organización que ha dado el Estado Mayor del Ejército de Tierra que supone concentración de instalaciones». Se trata de un «plan de reestructuración del Ejército que conlleva racionalizar recursos públicos y el concentrar efectivos e instalaciones».

Según Melle, esta estrategia «viene de años atrás, desde que el servicio militar dejó de ser obligatorio y pasó a ser profesional» por ello, «a partir de ese momento los efectivos disminuyen considerablemente y se lleva a cabo una reorganización». El departamento dirigido por Carme Chacón tiene previsto que el cierre se produzca «en el entorno de finales del primer semestre de este año», según declaró Melle a preguntas de los periodistas. El traslado se realizará de forma íntegra, con los 73 efectivos que actualmente prestan servicio en el recinto militar.

El anuncio de Defensa provocó ayer la respuesta inmediata del alcalde de Cuadros, Marcos Martínez Barazón, quien señaló su «estupor, tristeza e indignación» por el cierre de la infraestructura. El regidor criticó que ni el Ministerio de Defensa ni el Gobierno se hayan puesto en contacto con el Ayuntamiento para comunicarle el desmantelamiento definitivo del recinto militar, que será trasladado al acuartelamiento El Empecinado de Valladolid, «como empecinado está el PSOE en que se cierre», destacó.

Martínez Barazón apeló a los 40 años que lleva instalado el polvorín en su municipio para asegurar que «está completamente integrado, como una localidad más». El alcalde rompió una lanza a favor de las 73 familias que dependen de los militares que trabajan en el recinto, muchas de ellas afincadas en el municipio de Cuadros «al que han contribuido de forma importante durante todos estos años, especialmente apoyando su crecimiento». Martínez Barazón acusó a la directora general de Infraestructuras de Defensa de mentir «porque asegura que el cierre está justificado por los ajustes derivados de la creación del Ejército Profesional de la que se acaban de cumplir diez años» y que «justo entonces, el Ministerio de Defensa realizó grandes inversiones en el recinto militar, con infraestructuras más modernas y las últimas tecnologías y que lo convirtieron en uno de los más desarrollados del país». Martínez recordó que el pasado día 1 se llevó a cabo un pleno en el Ayuntamiento de Cuadros en el que se votó una moción para instar al Ministerio de Defensa y al Gobierno central a mantener abierto el polvorín, «no sólo por una cuestión emocional, sino porque creemos firmemente en el polvorín, en que se encuentra una ubicación perfecta y que tiene unas medidas de seguridad que no ofrecen ninguna duda».

Según Martínez, «las 73 familias que dependen de los militares del polvorín han contribuido a asentar población en el municipio» y su traslado supondrá un golpe, «no sólo por la pérdida de empleos sino también por la marcha de estas familias».

El alcalde de Cuadros tuvo duras palabras para el Gobierno y el PSOE, ya que destacó que «por lo que ayer apostaban hoy lo cierran sin justificación» y criticó «la política de engaños y el leonesismo de pacotilla» del partido liderado por Francisco Fernández. En este sentido, Martínez exigió un pronunciamiento público del secretario general del PSOE de León contra el desmantelamiento así como del presidente del Gobierno para que «en su próxima visita anuncie que el polvorín se queda. Si no es así, se mostrará su desinterés por la provincia», concluyó.