La potabilizadora recupera el 30% de su capacidad de bombeo
Un sistema alertará del aumento de la materia en el agua
La empresa concesionaria de la gestión del agua potable y residual en La Bañeza, Aqualia, ha finalizado ya la segunda de las mejoras en la estación de tratamiento de agua potable (Etap), encaminada a conseguir una optimización de su rendimiento y evitar problemas como el que se produjo esta Navidad, cuando las instalaciones, cuya ampliación se inauguró en el 2008, no fueron capaces de eliminar la materia en suspensión que se encontraba en el líquido elemento ante la crecida del río Órbigo. Precisamente la ampliación se había acometido para evitar este problema.
Así, a la sustitución de la arena de los filtros de agua se une ahora una modificación en una de las tres bombas que lleva el agua hasta estos filtros. Al parecer, por un error de diseño, la bomba se descargaba, de manera que dejaba de funcionar hasta que se volvía a alimentar manualmente de agua. Estos suponía una pérdida de capacidad de bombeo de agua a los filtros del 33%, con los consiguientes problemas que pudiera originar en caso de que la demanda de agua exigiera el funcionamiento de las tres bombas.
El agua que se recoge del Órbigo pasa a unos depósitos de tratamiento y decantación. El grupo de bombas en el que se ha actuado es el que trasiega el agua de los depósitos de decantación a los filtros, penúltimo paso del tratamiento, antes de su desinfección final.
Alerta a distancia. Aqualia se había comprometido a acometer diez mejoras en la potabilizadora sin cargo al Ayuntamiento, además de proponer una mayor automatización de la Etap y otras reformas de mayor envergadura. Además de la mejora del bombeo a los filtros, en estos momentos se instala un analizador de turbidez, que alertaría a distancia y de manera automática a los operarios de un exceso de materia en suspensión del agua captada del río para poder actuar con la mayor rapidez posible, así como la sustitución de los medidores de presión que gobiernan el lavado automático de los filtros, sistema que, según informó Aqualia al Ayuntamiento de La Bañeza, «no ha funcionado nunca». En un plazo de dos semanas podrían estar finalizadas ambas mejoras.
El coste aproximado de las intervención ejecutada y de las que se realizan en estos momentos ronda los 8.500 euros, cantidad sensiblemente inferior a los 422.000 euros de inversión precisa para un mejor funcionamiento de la Etap, que el Ayuntamiento tratará de acometer con ayuda de la Junta de Castilla y León.
Desde Navidad no se han registrado nuevas incidencias en la calidad del agua.