Diario de León

El Parque de Charo González sumará a las 1,6 hectáreas ejecutadas otra más

Las obras de la primera fase de la zona de ocio se encuentran a punto de finalizar

Un aspecto de las pérgolas y los bancos instalados junto al acceso sur del parque.

Un aspecto de las pérgolas y los bancos instalados junto al acceso sur del parque.

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A. Domingo | LA Bañeza
León

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La primera fase del Parque del Mayor Charo González se ha librado de las inauguraciones de precampaña electoral por la aparición de infraestructuras que obligaron a retrasar las obras. Con una primera fase prácticamente terminada, esta misma primavera se podrá pasear por sus viales y plazas, a las que especies arbóreas dan nombre. La obra, que se adjudicó en 469.910 euros, necesitó de una ampliación de plazo que el Ministerio de Administraciones Públicas concedió. La adjudicataria, Selprats, tiene hasta final de junio para acabar los trabajos.

Mesas de pícnic, bancos a los que aún no se ha quitado el envoltorio protector, fuentes, un estanque, pérgolas, zonas verdes y un estanque, además de una pista de ejercicios para mayores, son la oferta del mayor parque jamás construido en La Bañeza: en esta primera fase se han ejecutado 15.913 metros cuadrados de parque y la segunda fase contempla cubrir la superficie que falta hasta completar los 26.270 metros que, en su día, cedió al municipio el cronista oficial de La Bañeza, Conrado Blanco, para la ejecución de un espacio de ocio que lleve el nombre de su desaparecida esposa.

El alcalde de La Bañeza considera el parque como remate de las obras del río: el oasis en el que desembocarán los paseos para peatones y ciclistas -en los accesos sur y norte se han colocado arcos en los atar las bicicletas-, que ofrecerá su sombra una vez que los árboles plantados hayan crecido lo suficiente y el frescor del césped a todos los que allí se acerquen.

La piedra y la madera para cerrar. Llama la atención el cerramiento del parque. En los puntos que ya es definitivo, la piedra, encarcelada entre hierros, y la madera, colocada en lamas verticales con espacio entre éstas que hacen visible el interior resulta novedoso en la ciudad. En la zona por la que se ampliará el parque, en la que se ha instalado un tercer acceso, el vallado no sigue estos patrones. Con una malla metálica, parece que se sustituirá por los materiales citados cuando la financiación permita acometer los 10.367 metros cuadrados que restan por ejecutar.

En esta superficie es preciso descontar un vial que sustituirá al actual acceso a las fábricas que se encuentran junto al río Tuerto.

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