El final de las obras en la travesía de la N-VI se fija para el 13 de mayo
Una de las rotondas de acceso a la ciudad por la N-VI.
No cae en martes, aunque por ser viernes no es buen día según la tradición anglosajona. El 13 de mayo, expira la prórroga concedida ayer por el Pleno de la corporación municipal bañezana para finalizar las obras de urbanización de la travesía de la N-VI, en la que deben acometerse la reparación de «pequeños defectos que se han encontrado, terminar la rotonda de entrada desde la carretera de León y el asfaltado del tramo», según explicó el concejal de Obras, Tomás Gallego.
La empresa adjudicataria de las obras, Comsa, S.A. deberá asfaltar un tramo de unos tres kilómetros aplicando una capa de rodadura en ambos sentidos de la calzada -”con un ancho de 8,50 metros, incluidos los arcenes-”, excepto en las rotondas, donde se debe nivelar el firme antes de aplicar el aglomerado final. Por otra parte, será necesario fresar algunos puntos de la travesía, especialmente aquellos en los que empalma con otras calles.
La segunda fase de la travesía se inició en septiembre del 2009, tras una adjudicación por un importe de 2.835.770,90 euros, con un plazo inicial de ejecución de 15 meses.