Rediós, ¿a quién voto?

Carta te escribo martín martínez

Querido hermano: Pasada la Semana Santa, comenzamos a padecer las elecciones. Espaciamos cartas y uno hasta se vuelve un tanto vaguete y acorta la misiva. Esa, que encabeza, sería la frase del abuelo si viviera. Hasta 1936 votó en libertad aunque decía que siempre con la mosca detrás de la oreja. Claro que menuda tropa política conoció: a Romanones, a García Prieto, a Manuel Gullón y a aquel cura de Villoria, canónigo de Astorga, el reverendo Juárez. Entonces los candidatos sacrificaban terneras para conseguir votos y de Santiagomillas hay una foto de buena cuchipanda. Ahora, y este año, será por la crisis, ni un mal lapicero, que los encendedores están desterrados por eso del tabaco.

Rediós, hermano ¿a quien voto? Bien sé yo que estamos con las municipales, pero están bien enredadas a nivel nacional y las consecuencias derivadas llegarán desde Madrid, o Valladolid, donde ahora toca. Y así será siempre, por la connivencia de los locales, o sea los alcaldes y concejales que, salvo raras excepciones, dicen amén a lo que les propongan desde arriba.

Hombre, mira, los partidos pequeños, esos que apañan como el poeta, las hierbas que otros desechan, a veces no cuentan, pero cuando andan de llave son capaces de abrir la cueva de los cuarenta. Y la marrana al río. Así que la duda existencial se ha asentado en mi sesera. Para el Pisuerga lo tengo claro, aunque no te lo diré porque es personal, secreto e intransferible.

Lo malo es lo de aquí, lo de casa; un sinvivir. ¿El PSOE? Acuérdate la que nos montaron con el ferrocarril del Oeste; es imperdonable el engaño en que nos han tenido. Por citar un caso, claro. ¿El PP? Otro que tal baila; coño, después de darle en los morros al PSOE con la autopista a León, que tenía que ser autovía, llegan ellos y nos la clavan; ahí la tienes, la más barata en su construcción, la más cara en el peaje, malamente cuidada y ahora largando a los trabajadores. Culpable fue de este desaguisado la UPL cuando mandaban Pelines, y el desaparecido Otero; se doblegaron al peaje por coger cacho en León y Valladolid; y lo cogieron; eso quiere decir que es grupo residual pero hiede -“como los anteriores- que no huelas.

Mi leonesismo -“que sabes practico - no coincide con éste, ni con el nuevo evangelio de Rodríguez de Francisco que aquí lidera Peyuquina; mismos perros con sus cachorros y distintas carrancas; bueno ni eso. Personalmente, a sus dos líderes, Soto y González, ni un pero. Como tampoco se lo pondré a Cordero y su boina con quien departo hace casi 40 años; él era un rapaz sin el look de las gafas. Y nada te digo -para qué - de esa candidatura fantasma, de subvención, del gurú bercianista Tarsicio.

Hermano, hasta pasado el 22 no habrá más comunicaciones; no sé cómo andas tú, pero yo hasta esa fecha seguiré rascándome; después, a lo mejor sale herida. ¿Habrá mayoría? Y si no es así ¿cual de los pequeños abrirá la puerta? Y yo en mi duda: Rediós, ¿a qué partido voto?