El Ayuntamiento recibe la obra de la N-VI que tiene tres nuevas rotondas

El pasado jueves 14 de julio tuvo lugar la firma del acta de recepción de la obra de urbanización de los márgenes de la carretera N-VI en el casco urbano de La Bañeza, en su segunda fase. Hay que recordar que hubo una anterior en la que se creó una zona de aparcamiento frente al Instituto Vía de la Plata y se renovaron las canalizaciones, con un desembolso de 142.000 euros que aportó el Ministerio de Fomento.

Esta segunda fase, ha consistido en el acondicionamiento de esta carretera desde las inmediaciones de la localidad de San Mamés de la Vega hasta el camino del matadero. La intervención ha creado tres nuevas rotondas y transformado las dos que existían en los cruces del hipermercado Eroski y la carretera de León, donde desaparecieron los semáforos. También se mejoraron y crearon nuevas aceras y se instalaron farolas, árboles y mobiliario urbano en todo el tramo, que también se asfaltó. La empresa adjudicataria de las obras Comsa, S.A ha asfaltado un tramo de cerca de tres kilómetros aplicando una capa de rodadura en ambos sentidos de la calzada -" con un ancho de 8,50 metros, incluidos los arcenes-", excepto en las rotondas, donde se ha nivelado el firme antes de aplicar el aglomerado final.

Esta fase final de la travesía se inició en septiembre de 2009, tras una adjudicación por un importe de 2.835.770,90 euros, con un plazo inicial de ejecución de 15 meses.

Tras examinar la obra y ver que se adecuaba perfectamente a las prescripciones técnicas que rigieron la contratación, el Alcalde de La Bañeza, José Miguel Palazuelo, Ana Isabel Fernández Borge, directora de las obras, y Sergio Martínez Anaya, en representación de la empresa Comsa, adjudicataria de las referidas obras, firmaron el acta de recepción con la que se pone punto y final a una de las obras más importantes de La Bañeza en los últimos años.

Las dos fases de urbanización de la N- VI ha supuesto la construcción de aceras y de un carril bici, así como la instalación de alumbrado público en el total del tramo. Además se aligera el tráfico con rotondas en los cruces de la travesía con las calles de Don Pedro Rodríguez Arrote y acceso a la Azucarera, además de convertir en glorietas las rotondas partidas de acceso a la ciudad desde León y el cruce con Genral Benavides.

La antigua carretera se ha transformado en la avenida más importante y larga de la ciudad y favorecerá la actividad industrial y comercial. El coste final ha superado los 3,5 millones de euros, ya que las obras se adjudicaron en 2,8 millones de euros, cantidad a la que se suma 305.000 euros de una ampliación de la obra en el 2010 y una primera fase ejecutada el 2008, con un coste de 142.000 euros y que supuso la urbanización de la nacional tras pasar a ser de titularidad municipal.