Riaño acusa a Alsa de incumplir el contrato de concesión del barco turístico
La embarcación lleva dos años sin hacer paseos por el pantano al estar averiada
El barco del Ayuntamiento de Riaño lleva apartado fuera del embarcadero casi dos años.
El Ayuntamiento de Riaño va a iniciar acciones legales contra la empresa Alsa dado que el barco turístico lleva casi dos años sin funcionar. La explotación de este barco fue concedida a la empresa Alsa hace varios años y tenía como cometido la realización de paseos turísticos a lo largo de todo el embalse de Riaño. El alcalde de Riaño, Javier Fernández, señala que el contrato con la empresa vence a mediados de agosto de este año y que por parte del Ayuntamiento se va a realizar una valoración de todos los daños que tiene el barco. «La empresa lleva casi dos años sin sacar el barco y una vez finalice el contrato estudiaremos las acciones legales contra la empresa», asegura Fernández quien recuerda que entre los compromisos de la empresa figura la explotación del barco con la puesta en marcha de los paseos turísticos por el pantano o cubrir el barco, algo que no se ha cumplido. Además «el motor del barco está averiado y la estructura tiene muchos golpes. Ha venido un perito a tasar todos los desperfectos que tiene el barco. Una vez valorados se iniciarán acciones judiciales contra Alsa por todo este perjuicio que ha ocasionado», precisa el alcalde.
No obstante una vez que finalice el contrato con Alsa a mediados de agosto el ayuntamiento volverá sacar a concurso la explotación del barco dado que, según el regidor, hay gente y empresas interesadas en poner en funcionamiento este barco turístico.
En el 2009 el concejal Guillermo Hernández ya denunció que la empresa aún no había cumplido con la ejecución del cerramiento del barco. Pero fue en el pleno de septiembre del 2010, cuando saltaron las primeras alarmas y el portavoz del PSOE, Miguel Angel Gutiérrez manifestó que el barco no había funcionado en todo el verano de 2010 y que «la empresa se está mofando de nosotros y del ayuntamiento». Hernández pidió la rescisión del contrato ya que la empresa no cumplía el pliego de condiciones. El alcalde de Riaño dijo que les estaban tomando el pelo «dado que cada vez que hablamos con la empresa nos dicen que van arreglar el motor del barco, pero lo cierto es que no hacen nada y el barco sigue sin funcionar».
El barco es propiedad del Ayuntamiento de Riaño quien lo compró y lo puso en funcionamiento en el 2003 con el fin de incluir un aliciente más al valor turístico de Riaño e inició una promoción de los paseos por el embalse del pantano que tuvieron una buena respuesta por parte de la gente. Incluso algunos centros escolares se acogieron a las tarifas reducidas para hacer estos paseos en barco. La posibilidad de ver desde el barco manadas de rebecos y ciervos o disfrutar con el paisaje de zonas como el valle del silencio en los parajes del antiguo Anciles se convirtió en una atractivo de los paseos del barco de Riaño, pero en los últimos años el barco descansa en una ladera del embalse averiado.