El frío reduce la participación en la exaltación de la morcilla polesa

Los vecinos de la capital gordonesa pusieron ayer el broche final a las populares fiestas del Santísimo Cristo, con la degustación a la hora del mediodía de la tradicional morcilla polesa. No faltó además, como ya viene siendo habitual por estas fechas, el reparto también de chorizo entrecallado regado con vinos de la tierra.

Los vecinos, a pesar del frío, se agolparon en la plaza del Cardenal Aguirre una vez finalizada la misa dominical, para celebrar el último día festivo con música y gastronomía. Una vez en el recinto, la organización comenzó a distribuir la morcilla, que fue compaginada con el baile vermú. Sí hay que destacar que en relación con años anteriores, laparticipación fue menor en este acto tradicional de las fiestas del Cristo, si bien la organizaciónlo achacó a la fría mañana que reinaba ayer en la montaña leonesa.

Por la tarde, se celebró en el campo de tiro Las Rozas la gran tirada al plato que repartió importantes premios entre los numerosos asistentes que participaron en el torneo, en el que se disputaron las tiradas de 15 platos en una serie, en la modalidad trillo. La tirada al plato se celebró bajo las normas del vigente reglamento de la Federación Castellano y Leonesa de Tiro Olímpico.

Los vecinos de La Pola despidieron de esta forma a los veraneantes con las fiestas del Cristo, que darán paso a los festejos populares del próximo verano para acoger de nuevo a los visitantes que cada año eligen este municipio para disfrutar de los encantos del valle de Gordón y su gastronomía.

Durante la jornada del sábado, se celebró el concurso de bolos base de la Diputación provincial, que dió paso a la degustación de una gran paellada. Por la tarde, la programación se basó en los más pequeños con dieferentes juegos infantiles y la celebración de talleres de pintura. Pero también, la tarde del sábado acogió el desfile de gigantes y cabezudos a cargo de la Asociación El Cañuco-La Poza de La Robla.