órbigo
Los ayuntamientos afrontarán la deuda de 98.000 euros del agua
La mancomunidad despide el 7 de octubre a su único operario.
Nave-almacén de la mancomunidad del Órbigo en la localidad de San Feliz.
Después de una densa reunión de tres horas, los miembros de la mancomunidad del Alto Órbigo acordaron el pasado miércoles agilizar el pago de los 98.000 euros que adeudan a la empresa gestora del agua desde el pasado otoño. Según se puso de manifiesto, 53.000 euros se podrán saldar ya gracias al dinero que figura en la cuenta y al pago del recibo del último trimestre, girado esta misma semana por fax.
Curiosamente, los cuatro municipios que utilizan el servicio, Villarejo, Benavides, Villares y Santa Marina, están al corriente de pago. Sin embargo, se formó un importante agujero «porque los antiguos gestores utilizaron el dinero del agua para otros servicios comunes, entre ellos, para devolver la tasa que había adelantado Villarejo por la basura tras renunciar este ayuntamiento a la prestación mancomunada», explican.
La reunión sirvió para que sus miembros tomaran conciencia de la «delicada situación económica de la mancomunidad», indican, y de la necesidad de ordenar las cuentas. Respecto a los casi 30.000 euros que también adeudaban los municipios, ya han alcanzado un acuerdo para abonarlos. Benavides, que acumulaba el montante más elevado, de 14.500 euros, por el impago de las cuotas de mantenimiento del 2009, accedió a resolver su deuda, a pesar de que entendía que durante ese año su municipio no había utilizado los servicios que prestaba el trabajador-bombero.
Precisamente, los votos de los ayuntamientos de Benavides, Villares y Turcia, todos del PP, habían logrado aprobar a comienzos de septiembre el despido de ese operario, encargado desde hace doce años de las labores de extinción de incendios. Consideran que el servicio era deficitario y poco eficiente.
Servicio desde León. El alcalde de Hospital de Órbigo, Enrique Busto, considera «una irresponsabilidad total quedarse sin un servicio que sólo se ve cuando se necesita», en referencia a la desaparición del camión anti incendios. Advierte que «ojalá no se requiera el camión para una emergencia», y se pregunta en qué situación quedan los vecinos cuando se desate un fuego si tienen que ser atendidos desde León.
En la reunión del miércoles se dio un paso más y se decidió, con la oposición de Villarejo y Hospital, seguir adelante con el despido improcedente del trabajador , que costará 35.538 euros. El alcalde de Santa Marina, Francisco Javier Álvarez, admite que este nuevo acuerdo se adoptó «con todo el pesar», pero recuerda que «parte de la maquinaria no funcionaba desde hace dos años y casi siempre llegaban antes los Bomberos de León que el operario».
La presidenta matiza que la mancomunidad carece de dinero, reconoce que en agosto cuando tomó posesión se encontró «con un caos económico que hay que resolver», pero si la mayoría prefiere asumir el despido con aportaciones extraordinarias, sólo le queda acatarlo, aunque entienda que no es el mejor camino.
Estrella Fernández niega que exista una guerra interna en el PP que ha allanado el camino para despedir a ese operario y señala que también en el PSOE puede haber votos contrarios, como «demostró Hospital y Santa Marina». La decisión se adoptó con la abstención de Santa Marina (PSOE-UPL) y contra la opinión de la alcaldesa de Villarejo, Estrella Fernández Mielgo, del PP, ya que la regidora apostaba por la continuidad del trabajador, al que, además, se le adeudan 8.000 euros de las últimas cuatro nóminas.