El PP acusa al alcalde de «subir los impuestos perjudicando a las familias»

El último Pleno celebrado en Santa Marina dio luz verde al incremento del IBI urbano de 0,40 a 0,44 y al IBI rústico de 0,65 a 0,70, con los votos a favor del PSOE y UPL y el voto en contra del PP. Al respecto, María Belén Alonso, portavoz del grupo popular, denuncia que «el alcalde sube los impuestos y crea otros nuevos para mayor perjuicio de las familias». Sin embargo, Francisco Javier Álvarez, alcalde de la localidad, discrepa con Alonso en su consideración. Según el regidor esta subida tiene su base en equiparar el IBI con el de los municipios cercanos y, «aún así nos situamos por debajo de sus tasas», puntualiza Álvarez quien añade que «no se había hecho una revisión de los valores catastrales desde 1996». A este respecto el alcalde es contundente y señala que «el fin de este equiparamiento es seguir manteniendo los servicios sociales de los que se benefician todos los vecinos». El PP por su parte considera que con ello se aplica una política antisocial que «no tiene ningún sentido y nos parece vergonzoso que se hable de políticas sociales, cuando estas subidas de sociales tienen muy poco».

Álvarez aseguró que esta subida, que entrará en vigor en 2012, «puede suponer un incremento de entre 8 y 12 euros en un recibo anual, pero permite que las familias, sobre todo las más jóvenes, puedan ahorrarse hasta 40 euros mensuales por ejemplo en subvenciones de guardería, ludotecas o actividades deportivas que corren a cargo de las arcas municipales». Para el PSOE «esta es una medida beneficiosa para todos».