Un beso para despedir el Polvorín
Juan Enrique Aparicio Hernández-Lastras presidió el último acto castrense que se vivió en el Polvorín de Cuadros.
La emoción y la despedida marcó el día de Santa Bárbara en el Polvorín de Cuadros. Un sencillo acto, presidido por el General de División, Jefe de la Fuerza Logística Operativa con sede en La Coruña, Juan Enrique Aparicio Hernández-Lastras, en el que los militares que servían en esta instalación se despidieron con un beso de la Bandera Nacional. Este fue el último acto para despedirse del destacamento donde recibieron su formación. En diferentes discursós quedó patente que el desmantelamiento definitivo de la infraestructura se producirá el próximo 1 de enero.
El fin de las actividades en esta unidad de almacenamiento de municiones es consecuencia de las Adaptaciones Orgánicas del Ejército para 2011, dentro del proceso de reorganización del Sistema de Apoyo Logístico que el Ejército de Tierra está realizando en toda España para lograr una mejor gestión de los recursos logísticos y alcanzar una Logística Militar más eficaz y eficiente. Valladolid será el próximo destino de la bandera que ayer plasmó la despedida de sus militares. Además durante la jornada se vivió una ofrenda floral que recordó a los caidos, así como la imposición de las medallas al mérito militar.
Con la celebración de Santa Bárbara se pone fin a 40 años de historia. El Polvorín entró en funcionamiento en 1.970 y en sus túneles y almacenes se han guardado municiones y explosivos de distintos tipos, destacando los proyectiles del lanzacohetes Teruel del Regimiento de Lanzacohetes de Astorga, de los que también se realizaba en este polvorín el mantenimiento.
